“Llegan unas cuantas vacunas a Bolivia y sirve para la propaganda, eso está mal”. Así, el Arzobispo de Sucre, Monseñor Ricardo Centellas, manifestó sus cuestionamientos con respecto a la publicidad de las vacunas contra la COVID-19.

El también Presidente de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB) se refirió al tema en su homilía del domingo, en la que también cuestionó la mercantilización de los inyectables y la forma en que se hace difícil el acceso a países pobres.

“Uno se pregunta, ¿esta vacuna está al servicio de la vida o del dinero?, ¿es un negocio o una ayuda?, ¿cómo puede costar tan caro? Los países pobres como el nuestro no podemos acceder, ¿cuántas vacunas han llegado a Bolivia? 20.000, ¿qué significa eso? Nada. Acá, en el hospital Santa Bárbara, trabajan 800 personas, van a vacunar a 150, ¿las demás? Solo estamos hablando del hospital y el resto, ¿qué somos”, preguntó.

Señaló que "nuestro mundo pareciera que no está organizado para servir al hombre y cuidar la vida", por eso, exhortó a seguir la enseñanza de Jesús priorizando la vida de todos, y no sólo de unos cuantos.

“La economía que existe en el mundo que sirva para la vida, ahora pareciera que es al revés”, reflexionó, al momento de criticar que se haga propaganda con las vacunas. Dijo que la pandemia es una experiencia fuerte de sufrimiento y dolor de la familia, y que la misma tiene que enseñarnos a valorar la vida.