El Gobierno de Bolivia busca alentar el uso de la medicina tradicional como un recurso para afrontar la COVID-19 con una exposición de esos productos realizada este viernes en la casa de Gobierno en La Paz.

En su discurso, el presidente Luis Arce resaltó el valor de productos naturales de uso ancestral como el eucalipto, huira huira, las hojas de coca, el molle y la manzanilla, entre otros, para "poder resistir el embate del coronavirus".

Arce destacó la importancia de conocer las "raíces culturales" de estos elementos que son "medicina primaria" para salvar vidas, muchas veces en el campo y para algunos sectores económicamente en desventaja.

Justamente, en la feria en el pasillo principal de la Casa Grande del Pueblo en La Paz varios productores y especialistas en medicina tradicional mostraron sus productos envasados, los tratamientos y dosis recomendadas para emplearos en distintas dolencias.

Mucha de esta medicina basada principalmente en hierbas fue presentada en extractos líquidos, infusiones, fomentos o pomadas con propiedades específicas según establecen las costumbres de las comunidades en las regiones del país.

El mandatario señaló que tanto la medicina convencional como tradicional "son absolutamente complementarias y útiles" para la prevención y cura de enfermedades, en especial en momentos como ahora, cuando "se masifican los casos de coronavirus".

Durante un encuentro breve con los promotores de medicina tradicional, Arce comprometió el apoyo de su Gobierno para la difusión de las propiedades curativas y para una mayor producción de estas alternativas.

Bolivia afronta lo que muchos han llamado una segunda ola de contagios con casi 2.000 casos reportados por día, algo que no se producía desde julio y agosto del año pasado y que ha comenzado en los últimos días de diciembre.

El nuevo coronavirus ha afectado inclusive a los ministros de Defensa, Edmundo Novillo, y de Exteriores, Rogelio Mayta, durante el reciente pico de contagio.

Desde la detección de los primeros casos en marzo de 2020 el país, con más de once millones de habitantes, acumula 9.304 decesos y 168.891 contagios confirmados.