La última vez que el exministro de Gobierno Arturo Murillo, mano derecha de la exmandatario Jeanine Áñez, utilizó su cuenta personal de Twitter fue el jueves pasado, cuando se limitó a publicar un artículo periodístico en el que reflejó su preocupación en torno al pedido de arraigo hecho por la Fiscalía, que solicitó alerta migratoria tanto para él como para Luis Fernando López, exministro de Defensa. Esto, ligado a la investigación de la compra aparentemente irregular de gases lacrimógenos para las fuerzas del orden.

De ahí en más, Murillo no actualizó sus plataformas oficiales. Tampoco apareció cuando Áñez y su gabinete se despidieron, bajando así 11 meses de mandato transitorio. Lo mismo sucedió con López, quien tampoco figuró ante las cámaras.

En las últimas horas, dos versiones comenzaron a sonar con fuerza, con relación a los paraderos de ambas exautoridades. Una de ellas apunta a que Murillo se encontraría ya en Panamá (pese a la alerta migratoria), con la intención de evitar posibles procesos judiciales. Fue el periodista brasileño Daniel Oiticica quien afirmó que el cochabambino habría entrado a Brasil desde Puerto Suarez; y que mientras Luis Arce era posesionado como Dignatario del país, Murillo se trasladaba hacia su presunto destino internacional.

“Entró por la frontera brasileña el 5 de noviembre y tomó un vuelo desde Sao Paulo a Panamá. Eso está confirmado por la Policía Federal, responsable de Migraciones de Bolivia.”, aseveró el comunicador de la nación limítrofe, en contacto con La Razón.

Otra versión, propagada por el portal de noticias Posverdad.bo, asegura que tanto el exministro de Gobierno como López se “escaparon” a Paraguay, para cumplir una travesía con Estados Unidos como punto definitivo. Según dicho medio, “fuentes de inteligencia” advirtieron que ambos “escaparon” a la nación guaraní para luego dirigirse al país del norte. Posverdad.bo alerta que la versión de Brasil es una suerte de dato para “despistar” que los dos alimentaron.

VIDEO Y LIBRETA DE EVO

En las pasadas horas surgió un video en el que se observa al exdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) Iván Rojas, sosteniendo un presunto diálogo telefónico con el exviceministro de Régimen Interior Javier Issa. En la comunicación, Rojas se muestra consternado por la libreta militar de Evo Morales. La voz de Issa (aparece agendado de ese modo en el celular del coronel) señala que la misma fue desaparecida y quemada por órdenes de Murillo.

“Doctor, le digo, en este momento estoy con la soga en el cuello. Personalmente le digo, doctor, en este momento estoy en una situación muy muy crítica y temo, incluso, riesgo por mi vida”, relata Rojas, quien en octubre fue sustituido de su cargo por el Comando Nacional de la Policía Boliviana.

Cabe recordar que la libreta del servicio militar y documentos personales del exmandatario resultaron decomisados de manos de Patricia Hermosa, quien era jefa de Gabinete de Morales. Ella debía inscribirlo como candidato a senador.

El equipo de la web de OPINIÓN intentó tomar contacto con Issa para conocer su versión de los hechos. Sin embargo, su número telefónico dio cuenta de una probable inhabilitación. 

Al respecto, el equipo legal de Morales analiza tomar acciones y elevar una demanda por el robo de la libreta, en consonancia con lo afirmado por el jurista Martín Irusta. “El video que se filtró en redes y medios de comunicación de manera categórica y contundente se llega a la verdad histórica. Realmente se ha sustraído la libreta del expresidente", mencionó el abogado.

El grupo evaluará los elementos y definirá la “estrategia” que empleará. De momento, el equipo contempla la posibilidad de acusar los delitos de uso indebido de influencias y robo contra los autores materiales e intelectuales".