Opinión Bolivia

  • Diario Digital | martes, 19 de marzo de 2024
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Diputado presenta proyecto de ley para que se viabilice la producción de dióxido de cloro

Remberto Calani, del MAS, solicitó formalmente que se concrete la norma, pese a que el Ministerio de Salud no permite su consumo para combatir el coronavirus. Se basa en la doctora Patricia Callisperis, mquien logró resultados óptimos con la implementación de la sustancia.
Una imágen referencial del dióxido de cloro, utilizado por varios médicos del país, entre ellos, Patricia Callisperis. GAMO
Una imágen referencial del dióxido de cloro, utilizado por varios médicos del país, entre ellos, Patricia Callisperis. GAMO
Diputado presenta proyecto de ley para que se viabilice la producción de dióxido de cloro

El diputado del Movimiento Al Socialismo (MAS) Remberto Calani presentó un proyecto de ley para la producción y distribución del dióxido de cloro y para que sean las empresas y laboratorios bolivianos los encargados de su elaboración para combatir el coronavirus.

“Estamos presentando un proyecto de ley para la producción del dióxido de cloro. Sabemos que el Ministerio de Salud no ha regulado más esto, pero los servicios departamentales de salud ya lo están produciendo. Por eso creemos que se debe contar con una ley de respaldo. Estamos invitando a los colegios médicos y bioquímicos para trabajar en la norma”, expresó.

De acuerdo con el diputado, para sustentar el proyecto de ley se basaron en la experiencia de la doctora Patricia Callisperis, quien está promoviendo en Bolivia el uso del dióxido de cloro, arguyendo que se trata de un gas que no se produce en la naturaleza. Se activa con clorito de sodio y ácido clorhídrico. 

“También hemos tomado la experiencia en el Beni con la atención médica y ahora estamos pidiendo que los  comités (científicos departamentales) documenten y pueda ser utilizado este dióxido de cloro como parte del medicamento”.

El diputado Calani dijo que en el proyecto de ley también se propone que por esta etapa se libere de impuestos y aranceles a las empresas productoras y se puedan traer los insumos necesarios con agilidad y facilidad.

El producto, que no es considerado como medicamento por la Organización Mundial de la Salud (OMS), es impulsado por el biofísico alemán Andreas Kalcker.

En las redes sociales, varios usuarios del mundo se han hecho eco de experiencias aparentemente personales luego de su uso, coincidiendo que les resultó favorable en la salud.