Luego de la denuncia de secuestro de uno de los líderes de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC), Antonio “Tonchy” Bascopé, tras ser liberado del penal de Palmasola, de Santa Cruz, el martes, el viceministro de Régimen Interior y Policía, Nelson Cox, brindó una conferencia de prensa en la que aclaró ayer que fue detenido nuevamente y trasladado a Sucre.

“Salió en libertad, pero nuevamente fue aprehendido en cumplimiento a un mandamiento de los fiscales en Chuquisaca, no existió ningún secuestro, sino el cumplimiento fiel de lo que manda la Constitución”, manifestó.

Sin embargo, Yessenia Rodríguez, la esposa de Bascopé, tras denunciar que fue subido por la fuerza a una camioneta negra por cuatro policías, con rumbo desconocido, aseguró que sufrió tortura. 

“Mi esposo me llamó, está en Sucre. Lo han torturado de la peor manera. El tiene una hernia y no puede caminar”, lamentó.

Dijo también que tuvo que ser internado en un centro médico cuando iba a ser sometido a una audiencia para presentar su declaración informativa ante el Ministerio Público.

Su abogado Martín Camacho alertó de una maniobra política e intento de que su cliente firme una notificación para continuar la persecución.

Bascopé está acusado por los destrozos en la Fiscalía General del Estado de Sucre, el 6 de octubre de 2020, cuando un grupo de manifestantes, entre ellos otro de los líderes de la RJC, Yassir Molina, que se encuentra con detención preventiva en la cárcel de San Roque, pedían la renuncia de Juan Lanchipa. 

EN SUCRE

Según Cox, en ese entonces se generó una situación de zozobra por lo que se le acusa de causar amedrentamiento y actos vandálicos y delictivos.

“Estos actos tienen que ver con el proceso investigativo de una organización criminal que debió desarticularse el pasado año pero no fue posible”, añadió y dijo que no fue posible debido a que el entonces ministro de Gobierno, Arturo Murillo, era “cómplice” y “padrino” de la RJC.

El fiscal Daniel Fernández informó a ERBOL que el proceso que enfrenta actualmente es porque existen “suficientes indicios de responsabilidad”.

Legisladores del Movimiento Al Socialismo (MAS) e incluso el Ministerio de Gobierno se querellaron contra los miembros de la RJC.

Bascopé estaba detenido en Palmasola desde fines de 2020 por tráfico de sustancias controladas. Se sumó la denuncia por la portación de explosivos durante los conflictos postelectorales de 2019.