Ante el incremento de casos COVID-19, el Gobierno, a través de los ministros de Educación, Édgar Pary, y de Salud, Jeyson Auza, anunciaron ayer la ampliación del descanso pedagógico por una semana, es decir, que el retorno a clases está previsto para el 1 de agosto en el país. 

En este tiempo, se recomienda acudir a los puntos de vacunación y se habilita la tercera dosis para los niños de entre 5 y 12 años.

Los datos muestran que solo tres de cada 10 estudiantes en este rango de edad tienen la segunda dosis y apuran su inmunización. A su vez, un reporte reciente da cuenta de que Bolivia está en el penúltimo lugar de vacunación en comparación con países vecinos con el 51.03% de alcance. Chile llegó al 91.64% de sus habitantes.

Por otro lado, alertan que las nuevas variantes BA.4 y BA.5 atacan a las personas que no están vacunadas, principalmente niños y adolescentes.   

El titular de Educación reiteró el llamado a los gobiernos departamentales y municipales a asumir acciones que coadyuven a prevenir los contagios, especialmente de los  niños en edad escolar. A su vez, exhortó a facilitar los insumos de bioseguridad necesarios y el acondicionamiento de la infraestructura de las unidades educativas.

Mientras tanto, la autoridad sostiene una reunión nacional con los nueve directores departamentales de Educación para abordar la reformulación del calendario escolar sin descuidar la calidad del aprendizaje.

Por su parte, Auza entregó ayer medicamentos, pruebas antígeno nasal e insumos a 87 municipios de La Paz con una inversión de Bs 74.3 millones para enfrentar la quinta ola.

Explicó que las autoridades departamentales y municipales pueden formular medidas para exigir el carnet de vacunación anticovid como requisito, en el marco de sus competencias y autonomías.

 La directora del Instituto Nacional de Laboratorios de Salud (Inlasa), Evelin Fortún, citada por Urgente.bo, dijo que, de acuerdo a los informes sobre las nuevas variantes, afectan más a personas sin vacunas y advirtió que los niños y adolescentes son los que menos dosis recibieron en el país por lo que son un grupo vulnerable.

El esquema completo es de tres dosis y la última ya está habilitada para niños.