Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 10:30

Carolina Ribera, de "primera hija" al activismo por liberar a su madre

La primogénita de la expresidenta Jeanine Áñez recorre el país en busca de apoyo de autoridades y de la población "por todos los presos políticos". 

Amparo Carvajal junto a Carolina Ribera e su visita a Cochabamba. APG
Amparo Carvajal junto a Carolina Ribera e su visita a Cochabamba. APG
Carolina Ribera, de "primera hija" al activismo por liberar a su madre

"Nuestra familia ha dado un giro de 180 grados desde que mi madre asumió", son las palabras de Carolina Ribera, hija de la expresidenta Jeanine Áñez, en su visita a la ciudad de Cochabamba para reunirse con distintas plataformas en busca de apoyo por lograr la libertad de su madre, detenida en los penales de Obrajes y Miraflores de La Paz, desde el mes de marzo. Hoy, la joven pasó de elegir ropa para su madre a romper en llanto por su libertad.

El 15 de septiembre, hace casi un año y bajo su cargo de representante Presidencial de la Unidad de Gestión Social, Ribera entregó canastas familiares de alimentos, material de bioseguridad, electrodomésticos y televisores al hogar de niñas "Aniceto Solares", hogar de niños "Jesús Infante" y al Albergue integral para el adulto mayor "Cardenal Julio Terrazas", en Vallegrande. Hoy, también recorre el país, pero esta vez buscando ayuda y apoyo para que su madre pueda defenderse en libertad, acusada por el presunto delito de "genocidio" y el denominado "golpe de Estado de 2019".

Ribera es odontóloga graduada en la ciudad de Sucre e incluso ejerció esta profesión en el Beni por un tiempo, antes de emprender sus estudios en materia de Derecho, para incursionar en el escenario político influenciada por sus padres. Su padre, Tadeo Armando Ribera Bruckner, fue alcalde de la ciudad de Trinidad en 2005. Su madre, Jeanine Áñez, estuvo 2006 como asambleísta constituyente para la redacción de la nueva Constitución Política del Estado, también fue miembro de la Comisión de Organización y Estructura para el nuevo Estado, desarrollándose como abogada en el poder judicial. Este primer periodo concluyó en 2008. A partir de 2009, fue electa senadora representando al departamento del Beni por el partido Plan Progreso de Bolivia-Convergencia Nacional. Luego integró el Movimiento Demócrata Social (MDS), que le permitió ser legisladora desde 2015, según una entrevista con el diario El Deber.

"He estado en todos los bloqueos y todas las actividades, y justo tocó esto de la asunción de mi madre y me mudé a La Paz con ella y mi hermano, desde entonces no nos hemos separado", dijo en una entrevista con el medio cruceño, en diciembre de 2019.

"Mi madre es un trofeo de la élite masista (...) Esta es una justicia servil utilizada como represión política. La detención de mi madre sirve para mandar un mensaje de miedo a los líderes opositores y a los que piensan distinto", son sus palabras el día de hoy.

Al ser consultada sobre el apoyo a su madre, durante los primeros meses como presidenta dijo: "Actué más como su asistenta en los primeros días que como la primera dama, soy la primera hija", a tiempo de relatar la colaboración que realizada con la vestimenta y arreglo personal de su madre. 

En la misma entrevista, Ribera contó que aspiraba a las subnacionales por su ciudad, quizá una concejalía en la Alcaldía.Pero después de que su madre asumió el primer mandato del país postergó ese y otros proyectos. Junto a su hermano, siempre acompañó a su madre en el Gobierno, hasta el punto de que algunos "lujos" le fueran cuestionados. 

En mayo de 2020, la Fiscalía de Tarija recibió una denuncia penal contra Ribera por los presuntos delitos de uso indebido de bienes del Estado y uso indebido de influencias. Hoy, pesan sobre ella intenciones de procesarla por la presunta omisión en el registro de donaciones.