El líder de la bancada de oposición de Creemos y actual gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, ofreció una entrevista al medio O’Globo de Brasil y, entre otros puntos, se refirió al gobierno transitorio de Jeanine Áñez (2019-2020).

“La gestión de Áñez estuvo marcada por muchos errores, lo que generó una gran crisis para todos los que estaban en la oposición. Metieron en la misma bolsa a todos los que no estaban alineados con el MAS. Todos estos errores pesaron mucho. La corrupción de ese gobierno fue terrible y dejó en una situación muy dura a toda la oposición. Era un gobierno que tenía un mandato, no debió extenderse, pero la expresidenta se disculpó por haber extendido su mandato y por haber confiado en personas que negociaron los sueños y las luchas del pueblo boliviano”, señaló Camacho al medio brasileño, según reportó el periódico Ahora el Pueblo.

En ese sentido, Camacho señaló que Áñez debe rendir cuentas ante la Justicia, pero, dijo, en el marco de un debido proceso, aspecto que, a su parecer, no se está cumpliendo en la actualidad.

“A todas las personas, no solo a un expresidente, que sean detenidas se les debe respetar el debido proceso, se les debe garantizar sus derechos. En el caso del expresidente hay un revanchismo, una clarísima búsqueda de venganza. Un intento del MAS de mostrar a sus militantes que está tratando con mano dura a los que piensan diferente. Ella (Áñez) debe rendir cuentas, de acuerdo con las reglas, respetando sus derechos. Poner en riesgo tu salud no es parte de la sentencia que ni siquiera salió. Es un boliviano más que está siendo tratado injustamente por la Justicia boliviana”, sostuvo Camacho.

El pasado martes, el ministro de Justicia, Iván Lima, pidió a los dos líderes de las bancadas de oposición en el legislativo, Carlos Mesa (Comunidad Ciudadana- CC) y Luis Fernando Camacho (Creemos), apoyar el juicio de responsabilidades contra la expresidenta Jeanine Áñez por las masacres ocurridas en el país a finales del 2019.

Afirmó: “no hemos tenido éxito” para llegar a un acuerdo entre las bancadas del legislativo para viabilizar la aprobación de la proposición acusatoria contra Áñez, en cuya gestión se ejecutaron las masacres de Sacaba y Senkata, según confirmó el trabajo del GIEI-Bolivia.

CC y Creemos, quienes van en contra del discurso del Gobierno respecto a que el 2019  hubo un "golpe de Estado" en el país, se resisten a apoyar un juicio de responsabilidades contra la exsenadora, y lo condicionan a una eventual reforma judicial previa.

Entretanto, Añez se encuentra detenida preventivamente en el penal de Miraflores por dos casos relacionados con el presunto golpe de Estado del 2019.

El primer proceso es por lo delitos de conspiración  y terrorismo y el segundo por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución.