La visita del canciller de Brasil, Mauro Vieira, a Bolivia este jueves supuso un impulso para las relaciones diplomáticas entre ambos países con una renovada agenda bilateral que incluye temas como hidrocarburos, energía, seguridad, defensa, comercio e integración regional, entre otros.

El canciller de Bolivia, Rogelio Mayta, recibió a Vieira en la sede del Ministerio de Exteriores en La Paz para un encuentro que buscó "cumplir con el mandato de los presidentes Luis Arce y Luiz Inácio Lula da Silva de fortalecer, relanzar y profundizar las relaciones bilaterales", señaló el ministro boliviano.

Mayta sostuvo que Bolivia y Brasil "no solo son países hermanos por una frontera de más de 3.000 kilómetros, sino también por una historia política pasada y reciente común".

Según el canciller boliviano, en ambos países, la "fuerza y la convicción democrática" popular se impuso "frente a proyectos autoritarios, racistas y discriminadores que apostaron por escamotear a los más pobres, destruir la unidad popular y los avances hacia la justicia social".

La visita de la delegación brasileña permitió "avanzar en la definición de una hoja de ruta que establece y prioriza la agenda bilateral y multilateral concreta", resaltó.

"Con la reactivación de los mecanismos de diálogo bilateral, los distintos comités y comisiones mixtas se pondrán a trabajar este mismo mes en cuestiones de integración fronteriza, vial y ferroviaria, recursos hídricos y navegación, lucha contra el contrabando y el crimen organizado, cooperación en seguridad y defensa, entre otros temas", añadió.

A su turno, el ministro brasileño destacó las coincidencias entre los Gobiernos de Arce y Lula da Silva en cuanto a la inclusión social, desarrollo sostenible, medioambiente y la integración regional y bilateral.

"Brasil y Bolivia son socios históricos. Para nosotros esta visita tiene un carácter especial, ya que representa un importante paso hacia la plena retomada de la relación bilateral tan afectada en años recientes, para volver a estar en línea con la larga trayectoria de amistad que mantenemos brasileños y bolivianos", afirmó Vieira.

NUEVAS REUNIONES

El canciller de Brasil ratificó la invitación para que Arce participe en la Cumbre de los Países de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) prevista para los próximos 8 y 9 de agosto en la ciudad brasileña de Belén, en el estado amazónico de Pará.

También invitó a Arce a participar en una reunión de presidentes suramericanos anunciada por el mandatario brasileño para el próximo 30 de mayo en Brasilia.

"El objetivo de este importante encuentro será crear la oportunidad para el intercambio franco de perspectivas que permitan allanar el camino hacia una integración suramericana renovada", resaltó Vieira.

El diplomático reiteró además "el compromiso brasileño de actuar positivamente en el proceso" para completar el ingreso pleno de Bolivia al Mercosur.

Brasil también reconoció "la importancia de las exportaciones de gas natural de Bolivia" que contribuye a la "seguridad energética brasileña y genera renta y desarrollo para el Estado boliviano".

Mientras que Mayta informó que ambos países se propusieron "incrementar el intercambio comercial y económico" y estudiar "oportunidades conjuntas" en gas, biocombustibles, fertilizantes, entre otros.

Vieira también hizo visitas de cortesía al vicepresidente del país, David Choquerhuanca, y al presidente Arce, quien destacó en sus redes sociales ese encuentro.

"Vamos a profundizar nuestras relaciones bilaterales en torno a una amplia agenda de integración en materia energética, fronteriza, comercio, consular y otros", escribió Arce.

El Gobierno de Arce y su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), tienen afinidad política con Lula da Silva, que en sus dos primeros periodos presidenciales también tuvo como aliado al expresidente Evo Morales (2006-2019).