La expresidenta Jeanine Áñez se abstuvo de prestar su declaración informativa ante la Fiscalía General por las denuncias que se le siguen en el marco de un juicio de responsabilidades por los casos denominados FMI (Fondo Monetario Internacional) y Fundempresa. El primero por un préstamo y el segundo por la ampliación de una concesión. 

Pese a esto, la Fiscalía, que tiene un plazo máximo de 30 días para emitir una resolución, continúa con la “fase de acumulación de antecedentes”.

De acuerdo con la Ley 044, el caso puede derivar en la formulación del requerimiento acusatorio o, en su caso, el rechazo de la proposición acusatoria “dictaminando el archivo de obras por falta de tipicidad y de materia justiciable”.

En caso de seguir adelante, se recurrirá a la Asamblea Legislativa que por dos tercios deberá aprobar o rechazar el juzgamiento y derivarlo al Tribunal Supremo de Justicia.

Una comisión de fiscales encabezada por el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, se presentó en el Centro Penitenciario Femenino de Miraflores en La Paz a las 9.00 para tomar declaración a la ex jefa de Estado en dos de los cuatro casos impulsados por el Ministerio de Justicia.

Estos procesos están enmarcados en delitos como resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes, incumplimiento de deberes y discriminación por las que la Fiscalía General admitió en marzo pasado.

Áñez cumplió el martes un mes en prisión por el caso denominado "golpe de Estado" basado en denuncias de supuesta conspiración, sedición y terrorismo durante la crisis política y social que se produjo a finales de 2019 y que derivaron en la renuncia de Evo Morales a la Presidencia y la anulación de los comicios de ese año en medio de denuncias de fraude.

En la visita de una comisión de diputados a la cárcel, Áñez denunció vulneración de sus derechos y obstrucción a través de la burocracia para la atención oportuna de médicos, por ejemplo, y al mantenerla incomunicada.