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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 20:20

Talibanes ingresan a su segunda semana de poder en medio del repudio e indignación global

Los islamitas intentan de varias maneras demostrar al mundo que su régimen es tolerante e inclusivo, algo que muchos aún no se creen.
Los combatientes talibanes patrullan en Jalalabad, Afganistán. EFE
Los combatientes talibanes patrullan en Jalalabad, Afganistán. EFE
Talibanes ingresan a su segunda semana de poder en medio del repudio e indignación global

El control talibán ingresa hoy a su segunda semana de poder en Kabul, tras haber tomado la capital prácticamente sin oposición alguna, después de que el presidente afgano, Ashraf Ghani, abandonó el país.

Gobiernos como el de EEUU, manifestaciones en Reino Unido y una explosión de mensajes de apoyo en redes sociales, sobre todo para las mujeres afganas, son parte del repudio hacia este régimen que, en los últimos días, ha tratado de convencer al mundo de que permitirá el trabajo a las mujeres, entre otras concesiones.

"No queremos que nadie salga del país, este es su país, esta es nuestra patria común, tenemos valores comunes, religión común, nación común. (...) Hay una amnistía general, por lo que no habrá hostilidades", afirmó el martes el principal portavoz talibán, Zabihulla Mujahid, en la primera rueda de prensa tras la victoria.

La primera semana estuvo marcada por uno de los símbolos de la desesperación de muchos afganos por abandonar el país ante la llegada de los talibanes, en medio del caos en el aeropuerto internacional de Kabul donde las primeras imágenes que llegaban desde ahí mostraron a miles de personas desesperadas por subir a los aviones que despegaban.

El Ministerio de Defensa británico informó ayer en un comunicado de que al menos siete civiles murieron en el aeropuerto por el caos durante la última semana.

¿RÉGIMEN TRANSFORMADO?

Muchos talibanes se esforzaron mostrando en redes sociales cómo las niñas asisten a las escuelas en algunas zonas del país, dentro del nuevo discurso de la formación ultraconservadora, en el que aseguran que la mujer podrá trabajar o estudiar, aunque dentro siempre de los límites que marca la ley islámica o sharía, que regirá el nuevo régimen.

Ese nuevo Gobierno está en proceso de formación, según aseguran, con líderes talibanes como el mulá Abdul Ghani Baradar, cofundador de los talibanes y jefe de la oficina política de los insurgentes en Catar, implicado en las consultas en Kabul desde este fin de semana, unas reuniones en las que incluyen también a personalidades del bando derrocado, como el expresidente Hamid Karzai.

Pero son muchos los que no creen en el nuevo discurso y piensan que no es más que una buena campaña de promoción por parte de los talibanes, que han aprendido de sus errores del pasado, pero que cambiará en cuanto el mundo deje de mirar hacia Afganistán.

DIÁLOGO INTRAAFGANO

Un portavoz del grupo islamista Al Yazira declaró ayer que los derechos de las mujeres en la Afganistán de los talibanes serán establecidos en el diálogo con otras fuerzas del país, en una entrevista con la cadena de televisión catarí.

"La ley islámica es conocida por todos y no hay ambigüedades sobre los derechos de las mujeres, y también los de los hombres y los niños, y ahora estamos en una situación en que esperemos que durante las consultas queden más claros cuáles son estos derechos", afirmó Abdulqahar Balji.

Respecto a la seguridad en torno a la terminal aerea, dijo que los militantes talibanes que están controlando sus accesos desde el exterior y las tropas estadounidenses, que controlan su interior, "están en constante contacto".

Mientras tanto, el presidente de EEUU, Joe Biden, admitió que la evacuación de afganos tardará más de lo previmos e hizo un llamado a todas las aerolíneas del mundo a prestar su colaboración para tal acción.