La coalición oficialista que gobierna en Chile anunció este viernes que se presentará en una lista única con el grupo de ultraderecha Partido Radical (PR) en los comicios constituyentes que se celebrarán en abril, según Renovación Nacional (RN), una de las formaciones del grupo.

"Estamos muy contentos de este rotundo triunfo en el Consejo General que nos permitió aprobar el pacto electoral de constituyentes", afirmó a medios locales el conservador Rafael Prohens, presidente del partido, el más fuerte de la derecha chilena.

En los comicios, que tendrán lugar el próximo 11 de abril, se elegirán a los candidatos que formarán parte de la Convención Constituyente, un organismo integrado por 155 miembros que se encargarán de redactar la nueva Constitución chilena.

En la lista oficialista concurrirán 13 candidatos, por 11 distritos, del ultraconservador Partido Republicano, que actualmente no tiene representación parlamentaria pero sí está muy presente en la realidad política del país.

La decisión fue confirmada también por representantes de Evópoli, partido al que se le atribuye un perfil más moderado dentro de la coalición gubernamental Chile Vamos, formada por cuatro grupos de centro-derecha y derecha.

"La democracia interna de nuestro partido ha hablado y ha decidido dar un paso importante en favor de la unidad. Sabemos que en la próxima elección se juega el futuro de Chile", aseveró por su parte Andrés Molina, presidente de esta formación.

También se presentarán en la lista de Chile Vamos varios exministros que dejaron recientemente sus cargos para participar en estas elecciones, como el antes ministro de Agricultura, Antonio Walker o Cristián Monckeberg, exsecretario general de la Presidencia.

Los constituyentes tendrán hasta un año para escribir el nuevo texto, un proceso que se solapará con un ristra de elecciones, entre ellas las próximas presidenciales, programadas para noviembre.

El próximo lunes 11 de enero vence el plazo para la inscripción de los candidatos para estos comicios, para los que los partidos políticos de izquierda todavía no han anunciado ningún gran pacto.

El pasado octubre casi un 80 % de los chilenos votaron en un histórico plebiscito en favor de reemplazar la actual Constitución, heredada de la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990) y criticada por gran parte de la sociedad por promover la privatización de servicios básicos.

La votación se planteó como la vía política para suavizar la crisis social que vive el país, que comenzó en octubre de 2019 y que se extendió durante casi un año con protestas masivas contra el Gobierno y en favor de un modelo socioeconómico más justo.

La convención constituyente será un órgano paritario, algo inédito en el mundo.