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  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
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Hay más de 175 vacunas; Reino Unido, EEUU, China y Australia están al frente de la carrera

Empresas, farmacéuticas y universidades intentan inducir una respuesta inmune en un año, cuando la media es de 10.
Imagen referencial de vacuna contra la COVID-19. ARCHIVO
Una imagen referencial de la vacuna contra la COVID-19. FUENTE: EFE
Hay más de 175 vacunas; Reino Unido, EEUU, China y Australia están al frente de la carrera

En enero se descifró el genoma del SARS-CoV-2 (coronavirus). Al día de hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que hay más de 175 vacunas que están siendo desarrolladas, de las cuales 35 están siendo probadas en humanos; las propuestas por las farmacéuticas y universidades de Estados Unidos, China, Australia y Reino Unido están en su fase final.

De acuerdo a un informe, recogido por el medio Infobae, la media para fabricar una dosis que provoque una respuesta inmune a una enfermedad es de 10 años, sin embargo, la crisis global ha empujado a los gobiernos, autoridades científicas y a las empresas privadas a dedicar recursos de forma nunca antes vista, logrando un hito, si se consigue lanzar la vacuna contra el COVID-19 hasta el primer semestre del próximo año, como se proyecta.

CHINA Presenta dos actores en la carrera. Por un lado, está el Instituto de Wuhan para Productos Biológicos que trabaja junto a la compañía estatal Sinopharm. En julio lanzaron ensayos de fase tres en los Emiratos Árabes Unidos, en los que participarán 15.000 personas.

Por el otro, aparece la empresa china Sinovac Biotech, que está probando una vacuna desde un virus inactivo llamada CoronaVac. En junio, anunció que los ensayos de fase uno y dos no encontraron efectos adversos graves y lanzó una prueba de fase tres en Brasil.

REINO UNIDO La vacuna de vector viral desarrollada por la Universidad de Oxford con la firma sueco-británica AstraZeneca se basa en un adenovirus de chimpancé llamado ChAdOx1. Se encuentra en ensayo de fase dos y tres en el Reino Unido y de fase tres en Brasil y Sudáfrica.

AUSTRALIA El Instituto Murdoch de Australia está probando si la vacuna Bacillus Calmette-Guerin contra la tuberculosis puede o no generar protección contra el Covid-19. Sería una vacuna de reutilización.

ESTADOS UNIDOS Fue el último en entrar en la carrera, cuando el miércoles aunico ensayos programados con 30.000 voluntarios. Al igual que China, el gobierno apuesta por dos opciones. Una es la compañía Moderna, la primera en comenzar ensayos de una vacuna contra el coronavirus en humanos. Es una dosis genética que utiliza ARN mensajero para producir proteínas virales. La compañía espera tener dosis de vacuna listas para principios de 2021, además de que tiene la capacidad de hacer 500 millones de dosis por año.

La alternativa está en el trabajo conjunto entre la alemana BioNTec, junto con la estadounidense Pfizer y el fabricante chino de drogas Fosun Pharma publicaron resultados preliminares exitosos de sus ensayos de fase uno y dos de una vacuna genética realizados en los Estados Unidos y Alemania. Están por comenzar las pruebas de fase tres. Las autoridades reguladoras de EEUU autorizaron el proceso de vía rápida para su aprobación.

RUSIA A pesar de que su vacuna creada por el Instituto moscovita Gamaleya aún está en fase dos, Kirill Dmitriev, director del fondo de riqueza soberana de Rusia, anunció el miércoles a CNN que aprobará la vacuna para su uso el 10 de agosto o incluso antes.

FASES La fase preclínica contempla la administración a animales como ratones o monos, para ver si produce una respuesta inmune. Hay más de un centenar de vacunas en esta primera etapa de investigación y desarrollo. En la primera fase, la de las pruebas seguras, los científicos comienzan a probar la vacuna en grupos pequeños de seres humanos, con el objetivo de evaluar su seguridad y el tamaño de la dosis, y comprobar si la misma estimula el sistema inmune. Hay unas 19 vacunas actualmente en esta fase de desarrollo.

La fase dos o de pruebas extendidas se analiza la vacuna en cientos de personas divididas en grupos, como niños y ancianos, con el objetivo de analizar si los afecta de forma diferente. Además, avanzan aún más en el corroborar su seguridad y la capacidad de estimulación de la vacuna al sistema inmunitario. Finalmente, en la fase tres, de eficacia, las vacunas que superaron con éxito las fases anteriores son administradas a miles de personas para corroborar cuántas de ellas se infectan y comparar ese número con otro grupo que solo recibe placebos. Estos ensayos pueden determinar si la vacuna protege realmente contra una enfermedad. Es la etapa final antes de su aprobación y su autorización por las autoridades sanitarias.