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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Italia encara su reapertura entre dudas y las críticas de diversos sectores

Italia encara su reapertura entre dudas y las críticas de diversos sectores

Italia iniciará su desbloqueo el 4 de mayo, pero los planes del Gobierno fueron muy criticados ayer por quienes deberán seguir cerrados para contener la pandemia, como las iglesias o las peluquerías, mientras los contagios siguen a la baja.

El primer ministro, Giuseppe Conte, ha decretado que el 4 de mayo se reactiven las manufacturas, la construcción y el comercio mayorista, eso sí, con medidas de seguridad contra el coronavirus.

También se aligerarán las restricciones de movimiento: habrá que seguir confinado, pero se podrá salir de casa para hacer deporte manteniendo un metro de seguridad entre personas, para funerales con menos de 15 personas y también para visitar a "parientes".

Esta última cuestión, entre otras, ha suscitado las dudas. En el primer artículo del texto se lee que quedan permitidos los traslados por trabajo, salud, urgencias y para ver a "algún pariente siempre, que se respete la distancia de seguridad" y se use mascarilla.

Pero, por ejemplo, ¿son los novios un pariente? El Gobierno ha apuntado que esa calificación engloba a "cónyuges o parejas estables", y en los próximos días emitirá una nota para aclarar la cuestión.

La "fase de convivencia con el virus" seguirá el día 18 de mayo con la reapertura del comercio minorista, museos, bibliotecas, y llegará al 1 de junio, cuando será el turno de bares, restaurantes, peluquerías, centros de estética, barberías y espacios de masajes.

Precisamente, el Gobierno recibió las críticas de las peluquerías, que no entienden por qué se retrasa un mes su reapertura.

Muchos esteticistas lamentaron en redes sociales que de este modo se les aboca a cerrar definitivamente, a pesar de las ayudas que el Gobierno ha aprobado para las pequeñas empresas.

El secretario general de la Unión de Artesanos, Marco Accornero, apuntó que "se está penalizando innecesariamente a este sector" y aseguró que se podría también atender con mascarillas y guantes y recibir a menos clientes para evitar aglomeraciones.

Y advierten además de que mantener el cierre solo agravará otra de sus preocupaciones: la proliferación de peluqueros ilegales que atienden a domicilio y, claro, a escondidas de las autoridades.