Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 10:58

Debate sobre eutanasia se abre campo en pandemia tras el aborto

España se convirtió en el séptimo país en legalizar la práctica. En Argentina, donde se normó la interrupción del embarazo, avanza un anteproyecto.
Ilustración simbólica sobre la eutanasia. TRINO
Ilustración simbólica sobre la eutanasia. TRINO
Debate sobre eutanasia se abre campo en pandemia tras el aborto

En diciembre de 2020, movimientos feministas que integran la “marea verde” tomaron las céntricas calles de Buenos Aires, Argentina, para celebrar lo que han considerado producto de su “lucha”: entonces, el Senado de esa nación aprobó el proyecto de ley que dio luz verde a la interrupción voluntaria del embarazo en las primeras 14 semanas de gestación. El debate, con la legalización en consecuencia, se produjo en medio de la pandemia.

A poco más de tres meses de ese evento, histórico para los colectivos que apoyan el aborto legal y tomado como “ejemplo” por las organizaciones feministas de Bolivia, asoma otra discusión, distinta, sí, pero también asumida como urgente por diferentes sectores de la sociedad: la eutanasia.

La semana anterior, España se transformó en el quinto país del mundo en regular la norma de manera integral y, en consecuencia, se convirtió en el séptimo en legalizarla. En Argentina, por su parte, evoluciona un anteproyecto     que ya se encuentra en fase de revisión. Medios de la nación vecina estiman que este podría elevarse al Congreso a fines de abril próximo.

Perú, por otro lado, ha generado repercusiones luego de que se conociera, el 3 de marzo pasado, que allí se ha permitido la eutanasia a Ana Estrada, una mujer que consiguió acceder a esa práctica luego de cinco años de búsqueda.

¿Pero qué es la eutanasia, cómo se diferencia conceptualmente con relación a la muerte asistida y cuáles son los países que ya la han normado o se encaminan hacia ello? A continuación, algunos lineamientos de una problemática que intenta ganar terreno, también, en pandemia.

CONCEPTOS DIFERENTES

Es usual que los términos eutanasia, muerte digna y muerte asistida se usen de forma indistinta. Sin embargo, es necesario aclarar las diferencias. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la eutanasia es la “acción del médico que provoca deliberadamente la muerte del paciente”, mientras que la Real Academia Española (RAE) sostiene que se trata de la “intervención deliberada para poner fin a la vida de un paciente sin perspectiva de cura”.

El Mundo, de España, refiere que significa "buena muerte" y que existe una que es directa (anticipar el deceso de alguien que padece una dolencia terminal) y otra menos frecuente que es indirecta (tratar de disminuir el dolor con fármacos que pueden provocar la muerte, pero que no tienen la intención de causarla).

En el caso de la eutanasia directa, también es posible hablar de la activa, que lleva a la pérdida de los signos vitales a través de medicamentos letales; y la pasiva, que apunta a la suspensión del tratamiento y a la prolongación de la vida de forma artificial. 

La muerte digna es, en cambio, la que sucede con el acompañamiento médico para aliviar el padecimiento y la contención anímica. En este caso, el paciente no pide expresamente morir.

La muerte asistida consiste, por su parte, en facilitarle los elementos necesarios a la persona en agonía (fármacos) para que ella misma ponga fin a sus días.

SÉPTIMO PAÍS

El 18 de marzo de 2021, España se ha vuelto el séptimo país en aprobar la eutanasia mediante la norma. Diputados emitió 202 votos a favor, 141 en contra y 2 abstenciones. Se prevé que la ley entre en vigencia en tres meses, según El País, que recuerda que “el afectado debe sufrir una enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante que le cause un sufrimiento intolerable” para acceder a ella.

Así, se unió a la corta lista de naciones que también reglamentaron la eutanasia, como lo son Países Bajos (2002), Bélgica (2002), Luxemburgo (2009), Canadá (2016), Nueva Zelanda (2020) y Colombia (2014).

Países Bajos la aprobó de forma activa. Al igual que en el territorio belga, la medida fue ampliada a los menores de edad, situación que generó discusiones. 

Lo curioso se dio en el país oceánico, donde los electores que asistieron a los comicios generales del año pasado tuvieron, además de las boletas con los candidatos, el referendo para elegir sobre la eutanasia. Se aguarda que entre en vigencia en noviembre de este año. Aquí, aquellos que demanden la práctica deberán ser mayores de 18 años.

EN CONTRA

El Comité de Expertos de la OMS dejó establecido, a través de un documento de 80 páginas que forma parte de la biblioteca de esa entidad (bajo el nombre Alivio del dolor y tratamiento paliativo en el cáncer), su posición sobre la legalización de la eutanasia, pues considera que los mecanismos paliativos van en evolución y, por ello, no hay lugar para normar la práctica. “Con el desarrollo de métodos modernos de tratamiento paliativo, no es necesaria la legalización de la eutanasia. Además, ahora que existe una alternativa viable a la muerte dolorosa, debieran concentrarse los esfuerzos en la implementación de programas de tratamiento paliativo, antes que ceder ante las presiones que tienden a legalizar la eutanasia”, señala parte del informe.

Por su parte, la Asociación Catalana de Estudios Bioéticos (ACEB) de España se opone. Entiende lo siguiente: “Esta acción sobre el enfermo, con intención de quitarle la vida, se llamaba, se llama y debería seguir llamándose homicidio. La información y conocimiento del paciente sobre su enfermedad y su demanda libre y voluntaria de poner fin a su vida, el llamado homicidio asistido, no modifica que sea un homicidio, ya que lo que se propone entra en grave conflicto con los principios rectores del Derecho y de la Medicina hasta nuestros días”.

La Iglesia católica tampoco lo aprueba. Los fundamentos se respaldan en aspectos éticos. 

EN ARGENTINA Y PERÚ, EN PUERTA

El 3 de este mes, la peruana Ana Estrada generó noticia al ser la primera persona incaica en lograr el “sí” a la eutanasia. Esto fue posible luego de cinco años de citas en los tribunales.

“Soy libre. Mi lucha siempre fue la defensa por el derecho a elegir. Hoy lo he conseguido gracias a las personas que difundieron mi voz: aquellas que se tomaron el tiempo para leerme y comprender desde enero de 2019", posteó la peruana de 44 años, en Twitter. Padece poliomiositis desde los 12.

El portal local El Periódico encuentra en Ana a la “impulsora” de la eutanasia, considerando, también, que su petición tuvo el apoyo de la Justicia y la Defensoría del Pueblo.

En Argentina, por su parte, se trabaja un anteproyecto de ley para reglamentar la eutanasia y la muerte asistida. Medios de ese país, como El Litoral, ven que tras el debate sostenido sobre el aborto y su interrupción, es menos complicado ahora abordar la temática pendiente. La propuesta está próxima a afinarse y ser presentada en el Congreso. Estiman que sea posible a fines de abril.

El anteproyecto apunta a regular la eutanasia y la muerte asistida (ya explicados en la nota).

Infobae da cuenta de que, en 2012, en esa nación fue normada la "muerte digna". “Reconoce el derecho de toda persona a rechazar tratamiento médico cuando este solo puede prolongar la vida en un estado de enfermedad irreversible o incurable. Sin embargo, esta ley no contempla la eutanasia, ni el suicidio asistido para pacientes”, aclara ese portal.