La crisis en las calles de Perú es desbordante. Mientras que el expresidente Pedro Castillo sigue preso (deberá permanecer 18 meses bajo detención preventiva), el número de muertos en medio de la convulsión asciende dramáticamente y el Gobierno intenta buscar la “paz”. 

Por su parte, el Consejo de Estado de Perú, que une a los presidentes de los tres poderes, mostró su respaldo a la Policía y a las Fuerzas Armadas "en el control" de las protestas antigubernamentales, en las que han perecido al menos 22 habitantes del vecino país.

"Creo que el país debe respaldar y darles un aliento a nuestras fuerzas para restablecer la paz y tranquilidad", dijo el titular de la Junta Nacional de Justicia, Henry Ávila.

Ávila explicó que el consejo exhorta a que "cesen sus conductas", todos "los ciudadanos que están involucrados en estas acciones de violencia" en muchas de las regiones del país vecino.

Mientras tanto, la presidenta Dina Boluarte quiere transmitir cierta “tranquilidad” a los peruanos. Para ello, confirmó que recompondrá el Gabinete Ministerial comandado por Pedro Angulo, según dio a conocer el portal RPP Noticias.

Las renuncias de los ahora exministros Patricia Correa (de Educación) y Jair Pérez (Cultura) derivaron en la medida asumida por la mujer que hasta hace dos semanas acompañó a Pedro Castillo en calidad de vicepresidenta.

La violencia en las calles de Arequipa y Ayacucho, principalmente, es extrema. Ante ello, uno de los personajes que ha reaccionado ha sido el exmandatario Evo Morales, quien pidió la intervención de la CIDH. 

“Hacemos un llamado a la comunidad internacional, especialmente a los organismos de ONU y la CIDH, para que pongan un alto a las muertes y graves violaciones de derechos humanos que sufre el hermano pueblo peruano por reclamar Asamblea Constituyente y liberación de su presidente”.

Perú atraviesa 12 días de conflicto social y político desde el pasado 7 diciembre, día en que Castillo fue arrestado por la presunta comisión del delito de rebelión que motivó su destitución. La Justicia peruana ha decretado 18 meses de prisión preventiva.

Boluarte ratificó la legitimidad de su gobierno, mientras que las fuerzas de seguridad aseguraron que retoman el control en el interior del país tras las protestas y violentos enfrentamientos que esta semana han dejado más de 20 muertos y cientos de heridos.

"Estoy cumpliendo el orden constitucional y quiero trabajar con ustedes", dijo. Añadió que no renunciará.