El aluvión dejó a Tiquipaya con deuda de Bs 2 millones
La municipalidad debe a una decena de empresas que proporcionaron maquinaria pesada para el manejo del río Taquiña. Actualmente, la población está pagando las obras hidráulicas.
03 de febrero de 2019 (13:44 h.)
Deudas, proyectos demorados, reducción de personal y la postergación de actividades -las carnavaleras sobre todo-, son algunas secuelas que dejó el aluvión del 6 de febrero de 2018 en la Alcaldía de Tiquipaya.
Si bien durante los primeros días de la catástrofe algunas entidades privadas y los diferentes municipios del Eje Metropolitano de Cochabamba ofrecieron a Tiquipaya maquinaria pesada e, inclusive, personal que coadyuve en el retiro de la mazamorra de las viviendas afectadas y el manejo del río Taquiña, la buena voluntad tuvo fecha de caducidad.
Llegó un momento en el que el municipio se quedó solo, en medio del desastre.
Invirtió aproximadamente 10.000.000 de bolivianos en la adquisición de equipo pesado, según el alcalde de Tiquipaya, Juan Carlos Angulo, y contrató a más empresas que tenían ese tipo de maquinaria para que intervengan el río Taquiña.
Sin embargo, llegó un momento en el que el municipio ya no tenía capacidad económica, por lo que aplicó al menos tres medidas. Una de ellas fue la reducción de cerca del 50 por ciento de personal. También postergó actividades de índole social, desde las fiestas carnavaleras hasta las festividades patronales. Aún no está confirmado si esta gestión se mantendrá esa determinación.
Tampoco ejecutó proyectos en otras organizaciones territoriales de base, pero, según Angulo, los vecinos supieron comprender que, por ahora, son prioridad las comunidades que están próximas a torrenteras.
A pesar de esta serie de medidas, Tiquipaya llegó a 2019 con una deuda que bordea los 2.000.000 de bolivianos.
Esperan ese pago las entidades que fueron contratadas para el manejo del río Tiquipaya. El objetivo de las autoridades es cumplir con ese compromiso hasta marzo, como máximo.
EL PUEBLO PAGA
Considerando la situación económica de la Alcaldía, actualmente, algunas OTB están pagando por el mantenimiento de las obras hidráulicas deterioradas.
“Nosotros como municipio hemos tocado las puertas porque debemos del año pasado”, reconoció el responsable de la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) de Tiquipaya, Roberto Campero.
Seis barrios que están próximos a diferentes torrenteras de Tiquipaya debieron asumir este pago, pero uno se opuso.
Los cinco que estuvieron de acuerdo “pagaron 50 bolivianos por metro cúbico armado de gavión. (Son como) 12.000 bolivianos entre 300 socios que ellos han mencionado. (Sale a) como a 35 bolivianos o 40”, explicó Campero.
El dinero de la población cubre el trabajo de los albañiles u otros obreros que hacen los gaviones. Los que no tienen recursos para poner la cuota, pagan con mano de obra.
Según la municipalidad, cada fin de semana se realiza ese trabajo durante unas cuatro horas.
Los gaviones son una caja o cesta de metal o mimbre con forma prismática rectangular que están rellenos de piedra o tierra. Permiten el flujo normal del agua y la retención.
Generalmente, se usa material de la zona para armarlos, material que también es dado por los vecinos, quienes se encargan de acopiar.
PROYECTOS
Campero mencionó que, de forma paralela, hay otros proyectos que, según previsiones, culminarán en 2019.
A través de la Organización No Gubernamental (ONG) Nuevo Amanecer se gestionó 118 millones de bolivianos para los sistemas hidráulicos de todas las torrenteras que hay en el municipio. El Ministerio de Medioambiente y Agua desembolsó 3.5 millones de bolivianos que deberán ser destinados a la reforestación de áreas próximas a torrenteras, con la finalidad de estabilizar la tierra.
PROYECCIÓN
Campero reconoció que es probable que un fenómeno como el ocurrido en febrero de 2018 se repita en Tiquipaya, pero esta vez el impacto será menor, debido a que se tomaron previsiones necesarias. “No se puede detener (otro aluvión), no hay esa figura, lo que se hace es, a través de obras, minimizar el impacto”.
NECESIDAD
Para resguardarse adecuadamente de una nueva catástrofe, Tiquipaya necesita al menos 200 millones de bolivianos más.
Con ese presupuesto, se podrían “colocar muros, canalizar el río”, aseveró el Alcalde.
Afectación a casas suma Bs 12 millones
La Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) de Tiquipaya cuantificó los daños ocasionados por el aluvión solo en viviendas. En suma, la afectación asciende a los 12 millones de bolivianos.
Se evaluó desde las viviendas devastadas, hasta la caída de muros.
Requieren Bs 45 millones para obras
Tiquipaya necesita al menos 45 millones de bolivianos para reponer los sistemas hidráulicos y otras obras afectadas por la mazamorra de febrero de 2018, el puente Taquiña, por ejemplo.
Se prevé que está gestión se reconstruya esa infraestructura vial.
Reposición de servicios básicos
La mazamorra del 6 de febrero de 2018 acabó con las redes de muchos servicios básicos que tenía la población de Tiquipaya.
Las autoridades estimaron que se requieren 6 millones de bolivianos para reponerlos.
1 Homenaje a las víctimas
La Organización Territorial de Base (OTB) Juventud Chilimarca organizará un homenaje a las víctimas del aluvión del 6 de febrero de 2018.
Prevén organizar un acto especial en ese barrio de Tiquipaya la misma fecha en la que ocurrió la catástrofe.