El diputado opositor, Osney Martínez, dijo este miércoles que Rubén Costas y Percy Fernández "ya charlaron" con el MAS para que no obstaculice la postulación a un tercer mandato a Gobernador y Alcalde de Santa Cruz respectivamente, con la colaboración del Tribunal Supremo Electoral.
Explicó que ese acuerdo pudo percibir durante la sesión del martes cuando los diputados que pertenecen a Unidad Nacional y Movimiento Social Demócrata (MSD) viabilizaron la aprobación de la ley corta, que significaba descartar el proyecto de ley presentado por el senador German Antelo ante la Asamblea Departamental de Santa Cruz para inhabilitar a Rubén Costas.
Manifestó que existe un silencio cómplice del gobierno que permite que ambos líderes cruceños proclamen su candidatura en una "combinola con el MAS. O sea hay tratos, charlas, y hay hablado con el MAS y si el TSE permite la elección, habremos terminado de matar la Constitución", advirtió.
El opositor recordó que tanto Costas como Fernández fueron reelectos por segunda vez en la gestión 2010-2015 y esta nueva candidatura sería la "re-re-reelección" inconstitucional, tal como fue la candidatura del presidente Evo Morales.
El presidente en ejercicio, Álvaro García Linera, dijo que si bien la propuesta de Antelo los favorecía, el MAS lo descartó porque la convocatoria a elecciones subnacionales debe salir de una ley emanada por la Asamblea Legislativa Plurinacional y no de una Asamblea Departamental.
Informó que dieron la instrucción a los diputados del MAS para que, a iniciativa de cualquier opositor, se anule no solamente la segunda vuelta planteada por el Tribunal, sino también la distancia del 10 por ciento respecto al segundo para proclamar al gobernador.
Lamentó que las gobernaciones de Santa Cruz y Beni hayan dilatado el control constitucional de sus estatutos que fueron aprobados el año 2010. De haber sido aprobados, habrían ofrecido otras condiciones para elegir a sus gobernadores.
Anunció que el MAS presentará candidatos propios en todos los municipios y gobernaciones en base a la agenda 2025, frente a los liderazgos regionales de la oposición

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