El delegado de Unidad Nacional (UN) ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE), Francisco Aramayo, pidió este martes a los vocales de esta entidad destituir a la presidenta Wilma Velasco y al vocal Ramiro Paredes por las irregularidades que se presentaron en las elecciones generales del 12 de octubre.
En conferencia de prensa, Aramayo recordó que el pasado 21 de octubre presentó esta demanda de destitución al TSE, pero al no tener respuesta de los vocales dentro de los cuatro días hábiles, el Tribunal Electoral incurrió en el silencio jurisdiccional administrativo, que da por hecho la aceptación de la denuncia

"Estamos solicitando que se inicie el auto de procesamiento por faltas graves tanto a la presidenta como al vocal Paredes en el seno del Tribunal Electoral, de acuerdo a ley ellos mismos deberían tratar la denuncia con ausencia de los dos denunciados", afirmó Aramayo

La denuncia presentada por Aramayo hace alusión a la falta de una depuración del padrón electoral, un sistema informático con deficiencias que imposibilitó el conteo de votos, la autorización de propaganda electoral "desequilibrada" y el cambio de nombre del país en la papeleta de votación, al ponerle Estado "Plurinominal", cuando debía ser Estado Plurinacional.
El dirigente político sostuvo que por primera vez en la historia del país el oficialismo y oposición coincidieron en que el trabajo del TSE fue deficiente y tuvo muchos errores que deben ser solucionados.
Al respecto el vocal del TSE Ramiro Paredes, uno de los denunciados, dijo que sus colegas ya analizaron esta denuncia en Sala Plena el pasado lunes y emitirán su criterio al respecto en próximos días.