Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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Triste carnaval: inocentes mueren, heridos quedan ‘desamparados’ y autor cae preso

Simón Reluz, conductor que atropelló y mató a nueve personas, se enfrenta a ocho años de privación de libertad. Ha sido imputado por homicidio, lesiones graves y leves en accidente de tránsito con agravante (por conducir en estado de ebriedad) y omisión de socorro. 

Pobladores se concentran en el centro de salud del municipio. El vehículo indocumentado y el conductor que atropelló y mató a nueve personas en Independencia. AYOPAYAMANTA JAMUNI-RADIO DOMINGO SAVIO-DICO SOLÍS
Pobladores se concentran en el centro de salud del municipio. El vehículo indocumentado y el conductor que atropelló y mató a nueve personas en Independencia. AYOPAYAMANTA JAMUNI-RADIO DOMINGO SAVIO-DICO SOLÍS
Triste carnaval: inocentes mueren, heridos quedan ‘desamparados’ y autor cae preso

El carnaval más triste de Independencia. La entrada autóctona terminó en tragedia cuando un vehículo indocumentado, conducido por Simón Reluz R., embistió hace una semana a bailarines y músicos, en su mayoría de la zona de Tiquirpaya, y espectadores que se encontraban en la calle Sucre de ese municipio en Cochabamba. Nueve personas perdieron la vida, entre ellos un menor de edad, y 23 resultaron heridos. Todas las víctimas quedaron desamparadas y esperan la solidaridad de la gente debido a que el auto tipo vagoneta al ser “chuto” no cuenta con el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) que habría permitido la indemnización a los familiares de fallecidos y cubrir los gastos médicos de los accidentados.

La calle Sucre, cerca de la plaza principal de Independencia, se convirtió en el escenario sangriento. Las imágenes que circulan en redes sociales muestran el dolor y desesperación de los pobladores, mientras las víctimas, algunos con sus bombos y otros instrumentos musicales, se encontraban en el piso a lo largo de la vía. Los auxiliaron en ambulancias, vehículos privados e incluso carretillas hasta el Centro de Salud San Juan de Dios, ubicado en ese municipio, desde donde los heridos más graves fueron referidos al Hospital Viedma de Cochabamba.

Gritos y llantos se apoderaron del lugar. Muchos pobladores se concentraron en puertas del establecimiento de salud buscando la lista de fallecidos y heridos, aunque esa no fue una tarea fácil, mientras otros “descargaron su rabia” golpeando a Simón Reluz R., oriundo de la comunidad de Cantumarca, quien atropelló, bajo efectos del alcohol, a una treintena de personas. El conductor fue rescatado por un efectivo que pretendía trasladarlo al módulo policial, pero la reacción violenta de la gente que comenzó a agredirlo físicamente lo obligó a ingresar, junto con el detenido, a una vivienda particular. El autor aprovechó el “descontrol” y huyó del inmueble por la parte posterior, pero fue aprehendido la mañana del jueves en una casa de adobe, ubicada a dos horas de caminata del lugar del hecho, y luego fue puesto ante un juez cautelar que determinó su detención preventiva, por seis meses, en el penal San Pablo de Quillacollo.

ALCALDE COMUNAL Y SU FAMILIA ENTRE LOS SOBREVIVIENTES

El alcalde comunal de Tiquirpaya, Pascual Tola, junto a su esposa y uno de sus hijos que llegó hace poco del extranjero, participó de la entrada autóctona bailando moceñada. Los tres fueron atropellados por el conductor de un auto indocumentado que enlutó a la población.

Tola, al igual que toda su comparsa, fue sorprendido por la movilidad que iba a toda velocidad y que los embistió dejando varios muertos y heridos. El alcalde comunal y su familia se encuentran fuera de peligro. 

Según pobladores, la mayoría de las bailarinas son de la comunidad de Tola, mientras que los músicos de Kami y Charahuayto, quienes participaban de la fiesta de Carnaval para ganarse dinero.

El estado de otros heridos es de gravedad. Luciano Alvarado, de 53 años, tiene fracturas en sus dos piernas. Él y su hijo fueron a tocar a Independencia, pero cuando ya habían hecho su demostración apareció detrás suyo el auto de Reluz. El hijo que estaba al borde de la calle quedó en shock y, ni bien salió de ese episodio, buscó a su progenitor, quien estaba herido. Otro hombre se encuentra en terapia intensiva. Las familias piden ayuda para cubrir los gastos médicos, mientras siguen las investigaciones.

EL AUTO CORRIÓ COMO UN TORO’

“Mi esposo (Simón Reluz) estaba tomado, no estaba en su sentido. Le dije que no encienda el auto, pero apenas le puso la llave el auto empezó a correr como un toro. Yo no sé conducir y no pude ayudarlo a dominar el auto”, manifestó Aida V., esposa del conductor que embistió el pasado domingo a una treintena de personas, dejando nueve fallecidos, después de la entrada autóctona del Carnaval de Independencia, Cochabamba.

La mujer, en una entrevista con Radio Guerrilleros Independencia, dijo que ella y su hijo menor, de seis años, estaban en la movilidad ‘indocumentada’, conducida por su esposo, cuando ocurrió el accidente de tránsito en la calle Sucre. Esa noche, Aida vio que su esposo era detenido por un policía tras ser golpeado por pobladores y ella, cargando a su hijo, se alejó del lugar. Caminó por el monte, mientras llovía, hasta llegar a su casa en la zona de Cantumarca. 

Más tarde, se enteró que su esposo estaba prófugo. Aida aseguró desconocer del paradero del padre de sus hijos y se unió a las brigadas de rastrillaje puesto que temía que haya sido “ajusticiado” por los comunarios enardecidos. Reluz, de 48 años, fue aprehendido la madrugada del jueves en una casa abandonada de Cantumarca. Su esposa pide ayuda para las víctimas del accidente debido a que su familia es de escasos recursos económicos. “No tengo ni siquiera una oveja o vaca”.