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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Cámaras de vigilancia, sin funcionar a falta de tecnología y mantenimiento

Cámaras de vigilancia, sin funcionar a falta de tecnología y mantenimiento

Falta de mantenimiento y renovación son las principales causales para que centenares de cámaras de vigilancia estén suspendidas en su uso e incluso hayan estado guardadas en depósitos de distintas alcaldías por varios años.

La implementación de cámaras de vigilancia forman parte esencial del BOL-110 que debía arrancar con fuerza mayor a mediados de abril de 2019, a través de una renovación tecnológica en materia de seguridad ciudadana, aunque varios proyectos municipales de cámaras de vigilancia y los denominados "ojos vivos" datan de años anteriores.

Sin embargo, el hecho de haber adquirido e instalado los equipos de forma aislada, por municipios o zonas, constituye hoy un obstáculo, toda vez que la interconexión de las cámaras a un mismo sistema de vigilancia depende de varios factores como el buen estado y la igualdad en marcas.

Según una evaluación de la Policía Boliviana, antes de octubre de 2019, varios equipos de vigilancia funcionaban con antenas. La falta de mantenimiento impedía la limpieza en la señal que emiten las mismas y causó que la interferencia contamine la misma, llegando a mezclarse con varias provenientes de otras radiofrecuencias e incluso chocando con las de radiomóviles, edificios y domicilios.

FIBRA ÓPTICA A raíz de los constantes problemas que significaba la señal por antenas, se planteó realizar la interconexión de las cámaras haciendo uso de la tecnología de fibra óptica, a la par de la continuidad de las gestiones por poner en marcha el BOL-110.

En septiembre de 2019, el entonces  viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilfredo Chávez, se reunió con representantes  de la Alcaldía de Cochabamba y el Comando Departamental de la Policía para avanzar en las gestiones para la implementación del Sistema Integrado de Seguridad Ciudadana BOL-110, luego de haber iniciado en La Paz con centrales de llamadas, cámaras, patrullas inteligentes, drones y alertas vecinales.

El megaproyecto de seguridad BOL-110 prevé que todas las emergencias se centralicen en un centro de comando y control y en una sola línea telefónica de atención. Este sistema utiliza tecnología de última generación para enfrentar los crímenes.

CONFLICTOS DE 2019 Sin embargo, los conflictos postelectorales de 2019 postergaron la implementación de este megaproyecto de seguridad ciudadana y dejaron secuelas hasta hoy, especialmente en los municipios de Sacaba y Cochabamba.

Ya en 2020 surgieron reportes policiales de cámaras de vigilancia dañadas y muchas otras desconectadas a causa de los disturbios, especialmente en algunas zonas de la ciudad, como la noreste y sur. Sacaba no es la excepción.

Según el director de Seguridad Ciudadana del municipio de Sacaba, Jonathan Javier Delgadillo, los conflictos de 2019 dejaron en completo desuso las cámaras de vigilancia del municipio, debido al daño producido en la conexión por fibra óptica que tiene el eje troncal a lo largo de toda la avenida Villazón.

Según el reporte de Delgadillo, Sacaba cuenta con un total de 108 cámaras de vigilancia, 64 "ojos vivos"(que giran constantemente en diferentes ángulos) y 44 de tipo domo (que filman desde puntos fijos). Hoy splo funcionan 14.

"Cuando yo me he hecho cargo hemos hecho mantenimiento, hemos reinstalado todo y solo las cámaras que funcionaban, que eran alrededor de 4 o 5 en el eje troncal".

Delgadillo asumió la cartera de Seguridad Ciudadana en septiembre de 2020. En ese entonces, las pocas cámaras que reacondicionaron solo captaban imágenes en tiempo real y no almacenaban los videos en computadoras. Según el reporte que recibió, algunas personas mezcladas con los manifestantes de 2019 aprovecharon los disturbios para ingresar a las oficinas policiales y desconectar todo el sistema de vigilancia hasta el punto de dañarlo de forma permanente.

SIN COORDINACIÓN A criterio de Delgadillo, además del los conflictos que dañaron parte del sistema, la falta de coordinación entre alcaldías y el Comando Policial también fue el inicio de este problema, toda vez que las compras de equipos e instalaciones "no fueron pensadas a futuro ni con la posibilidad de generar un sistema integrado que permiten conectar, por lo menos el eje metropolitano, Sacaba, Cochabamba, Colcapirhua, Quilacollo, etc".

"En nuestro caso tenemos proyectada la adquisición de 12 cámaras de vigilancia más y reacondicionar las conexiones y la fibra óptica. Pero hay que reconocer que lleva tiempo y bastante presupuesto para tener todo funcionado al 100%. Imagínese, si se logra conectar todas las cámaras del eje con la fibra óptica, cuando suceda un hecho en Sacaba, por ejemplo, se podría hacer el seguimiento hasta Cochabamba, Colcapirhua y demás", señala.

COCHABAMBA En agosto de este año, la Alcaldía de Cochabamba inició con el mantenimiento de las cámaras de vigilancia del municipio. El Secretario de Comunicación y Gobierno Electrónico de la Alcaldía de Cochabamba, Enrique Mendieta, informó que el funcionamiento "fluctúa" entre 180 y 190 cámaras por lo que hay que hacer un "mantenimiento periódico". Agregó que 100 cámaras donadas por el Ministerio de Gobierno estaban guardadas. En ese entonces, se constató que varias radiobases se convirtieron incluso en nidos de ratas.

CULTURA DE SEGURIDAD Según Delgadillo, las cámaras de domicilios particulares son de gran ayuda para muchos casos de investigación policial. 

"Hay que resaltar que ya son bastantes las familias que han adquirido la cultura de la seguridad y que accedieron a cámaras domiciliarias para prevenir o registrar irregularidades. El precio de estos equipos también ha rebajado bastante", indica.

Mario Rodríguez, vendedor de alarmas y sistemas de seguridad en el centro cochabambino, indica que en los dos últimos años el número de clientes que buscan cámaras de vigilancia se ha incrementado hasta en un 100%, posibilitando así la importación de marcas más variadas y con precios más accesibles.

"Lo que antes era considerado un lujo hoy puedes encontrar hasta en 50 dólares. Hay cámaras pequeñas igual que funciona con aplicaciones móviles y que puedes chequear desde tu celular aunque estés un poco lejos de tu domicilio. La gente está bastante preocupada por su seguridad, sobre todo con la pandemia los robos han aumentado y quieren estar más protegidos", concluye.