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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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LOS QUILLACOLLEÑOS PARTICIPARON ACTIVAMENTE EN EL PROCESO INDEPENDENTISTA DEL ALTO PERÚ EN BATALLAS DESDE EL LEVANTAMIENTO DE ALEJO CALATAYUD HASTA 1825.

Quillacollo: escenario de heroícas batallas contra la colonia

Quillacollo: escenario de heroícas batallas contra la colonia



Quillacollo aportó principalmente con tropas, comida y armas al Ejército patriota durante el proceso revolucionario hasta la independencia del Alto Perú en 1825, coinciden los historiadores Itala de Mamán, Teófilo Manzano, Susana Portillo y Rosa Elena Novillo.

Itala de Mamán señala que “apenas se toma el cuartel y se hace la revolución en la ciudad (14 de septiembre de 1810) comienza el llamamiento de reclutas en las provincias”.

En las batallas que se realizaron en el valle como la de Viloma, Falsuri y Hamiraya fue importante la participación de las mujeres a “pie y en cuadrillas con sus niños”. Los pequeños asumieron un importante protagonismo porque transportaban el alimento para los patriotas y además servían como “campanas” para alertar sobre la presencia del enemigo, cuenta Rosa Elena Novillo.

Si bien la Villa de Oropesa fue el epicentro de la revolución desde 1810 hasta 1815, después los levantamientos se trasladaron a las provincias.

Hubo una gran participación de los campesinos mestizos e indígenas en el Ejército cochabambino. Quillacollo aportó primero con comida, con caballos y con armas que eran palos con cuchillos de mañazos en las puntas, hondas y otras macanas.

La historia contada en el libro “Quillacollo 100 años de rebelión” dice que a los pocos días de la revolución del 14 de septiembre de 1810, los patriotas se anoticiaron de la aproximación de las tropas realistas, la noticia llegó a Sacaba y Quillacollo y acudieron masivamente haciendo impenetrables las calles y las plazas. Así los campesinos, indios y mestizos contribuyeron con su valor a la lucha por la libertad del Alto Perú.

En la batalla de Aroma, se formó en Quillacollo una comisión que mandó a su vez comisionados a Sipe Sipe, Colcapirhua y Tiquipaya con el objeto de propagar la idea de alistar provisiones, armas, caballos y organizar una fuerza de caballería que se junte a la fuerza que debía llegar a Quillacollo desde Oruro.

En Colcapirhua don José Gerónimo Zamorano, en Tiquipaya don Silvano Catacora e Idelfonso Garnica en Sipe Sipe motivaron a todos sus habitantes apoyar a las tropas que pasarían por Quillacollo. Elaboraron tostados de maíz, fabricaron garrotes de combate de un metro, lanzas de dos con puntas a ambos extremos del algarrobo y molle, otros acomodaron en los extremos de las lanzas, cuchillos y clavos.

La batalla de Viloma (27 de noviembre de 1815), fue la última acción del Ejército cochabambino, luego este Ejército se disuelve y lo que vino después fue la enorme participación de líderes indígenas cuyo epicentro ya no fue la ciudad.

Esta batalla tuvo lugar en Sipe Sipe, en la rinconada que se encuentra al ingreso a Cochabamba, explica Teófilo Manzano.

Otro escenario de la contienda en la provincia de Quillacollo fue la batalla de Hamiraya (13 de agosto de 1811) donde participaron cerca de 40.000 hombres. Itala de Mamán menciona que hay versiones sobre la presencia de cadáveres enterrados en la zona fruto de la contienda del proceso revolucionario.

La batalla de Falsuri (16 octubre de 1823) fue una de las más importantes desarrolladas en el Valle Bajo de Cochabamba a la cabeza del líder José Miguel Lanza. En las comunidades de Illataco, Chulla, Buena Vista, Paucarpata, Ironcollo y Sanjapampa el general Lanza libró duras batallas contra el Ejército español comandado por Manuel de Goyeneche.

NICOLAS FLORES. El libro Quillacollo, 100 años de orgullo cita a Eufronio Viscarra cuando narra la participación de Nicolás Flores en el proceso de insurrección y dice: “Estaba Nicolás Flores en Aziru Marca, ocupado en el cultivo de sus tierras, cuando decidió sublevarse contra el gobernador”. Varios vecinos de la Villa lo animaron para que se pusiera a la cabeza del levantamiento a fin de libertar a los prisioneros cuya muerte era inminente.

La Historia de Quillacollo menciona a Nicolás Flores como uno de los gestores del proceso de independencia. El 14 de agosto de 1731 Flores hizo enarbolar la bandera colorada en señal de insurrección y se fue al valle de Quillacollo a sublevar a sus habitantes en contra el Gobernador.

DESARROLLO. Quillacollo es una de las provincias más importantes de Cochabamba al formar parte del Eje Metropolitano Departamental.

Por su ubicación (se encuentra a 13 kilómetros de la ciudad) tiene fácil acceso a la zona occidental y oriental del país a través de carreteras. Las autoridades departamentales han asumido la recuperación de la vía férrea en el Valle Bajo como un proyecto de urgencia para la región. Desde la ciudad son cerca de 15 minutos de viaje en transporte público, el mismo funciona las 24 horas del día.

Riqueza turística

La festividad de la Virgen de Urkupiña en Quillacollo

Urkupiña: La fiesta de Urkupiña es un enclave potencial del turismo de Quillacollo. Año tras año, la tradicional entrada folclórica, espectacular por su colorido y majestuosidad por la participación de miles de feligreses y engalanada con sus variadas músicas y danzas ha logrado ubicarse en los primeros puestos de las manifestaciones religioso culturales del país.

La arqueología en Sipe Sipe y Cotapachi

INKARRAKAY: Las ruinas arqueológicas de Inkarrakay están situadas en Sipe Sipe. Las mismas fueron construidas por los Incas como un centro ceremonial, administrativo y militar.

La región del valle central en periodo precolombino fue un importante centro de producción de maíz ya que en la región de Q’olapachi (ubicada en la parte sur de Quillacollo), se encuentran restos de varios Q’ollqas, una especie de silos, que servían para almacenar grandes cantidades de maíz, lo que convertía a la región en un verdadero centro de aprovisionamiento alimentario del imperio incaico.

Lugares de atracción

Fechas importantes

1. 1848

Quillacollo obtiene rango de capital de la Provincia Tapacarí, por Ley de la República promulgada el 22 de agosto.

2. 1857

Se creada la Municipalidad de Quillacollo. Las Juntas o Concejos Municipales reemplazaron a las Parroquias como centros generadores de actividades sociales y comunitarias.

3. 1879

Estalla la Guerra del Pacífico. Los quillacolleños también contribuyen a la defensa de la soberanía nacional.

4. 1900

Se eleva Quillacollo a rango de ciudad, por Ley del 14 de noviembre.