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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Cuantifican pérdidas económicas en Chiquitania por $us 1,140 millones

Cuantifican pérdidas económicas en Chiquitania por $us 1,140 millones

Las consecuencias de los incendios voraces en la Chiquitanía, sumadas a la deforestación y fragmentación de los ecosistemas naturales se han traducido en pérdidas o daños directos a más de 40 millones de árboles con valor comercial, lo que representaría en términos económicos una pérdida potencial para la economía nacional de más de 1,140 millones de dólares. En términos ecológicos y ambientales las pérdidas son irreversibles e inmensurables.
Estas estimaciones pertenecen a la Fundación para la Conservación del Bosque Chiquitano (FCBC). Desde el Gobierno aseguran que, hasta la semana pasada, 500 mil hectáreas fueron arrasadas por el fuego. Esta cifra, de acuerdo al análisis de la FCBC representa una pérdida de 40 millones de árboles con valor comercial. Considerando un promedio de 80 ejemplares por hectárea, multiplicados por el medio millón de bosque quemado, el resultado arroja una pérdida económica detallada antes.
Sin embargo, esto podría ser peor. De acuerdo a la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) -que realiza monitoreos de los focos de calor hace más de 10 años en el país- al 24 de agosto se cuantificó 1,4 millones de hectáreas quemadas, de las cuales se estima que el 30 por ciento representa a bosques y el 70 por ciento a pastizales y sabanas. 
De acuerdo a la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), la relación del valor del bosque es 10 mil dólares por hectárea. En el caso del bosque chiquitano, esto se traduciría en una pérdida multiplicada por los próximos 200 años, tiempo que demoraría una reforestación, según el Colegio de Ingenieros Agrónomos de Santa Cruz (Cinacruz).
El Bosque Seco Chiquitano es único en el mundo. Se encuentra en una zona de transición entre el clima húmedo de la Amazonía y el árido del Chaco.
Esta ecoregión cuenta con los bosques secos más ricos en especies vegetales y animales a nivel mundial y alimenta otros ecosistemas como El Pantanal y El Chaco, pues de ahí surgen vertientes de agua que los alimentan.
La FCBC señala que los incendios forestales provocaron la muerte directa de toda la fauna y pusieron en riesgo a más de 1.200 especies, de las cuales 43 son anfibios, 140 reptiles, 788 aves y 242 mamíferos.
Muchas especies pueden desplazarse, pero la mayoría perece en el lugar de los incendios al ser menos móviles o quedar atrapadas entre los fuegos. 
"Se afectan las fuentes de alimento, sitios de reproducción y de refugio para toda la fauna. Al pasar la crisis de los incendios, el impacto sobre la diversidad de animales será mayor y más extendido en el tiempo", advierte el documento “Desatinos y la extrema sequía originaron el desastre en la Chiquitanía”.

BIODIVERSIDAD Se asume que solo se conoce y se tiene registro del 20 por ciento de la riqueza de especies a nivel global. Tomando en cuenta la extensión, complejidad y desconocimiento de lo que contiene el Bosque Seco Chiquitano, tanto la deforestación como el fuego conducen de manera irreversible a la degradación de su biodiversidad en una magnitud aún mayor de la que se puede registrar con base en la información de especies que actualmente se tiene, según ese documento.
El análisis también contempla el desplazamiento de la población, la interrupción de sus medios de vida y de la asistencia escolar, el costo humano y económico del desarraigo, las pérdidas materiales de cultivos, viviendas y de activos productivos de la agricultura familiar, comunitaria y comercial, que dificultan su recuperación.
En cuanto a las afectaciones a la salud y seguridad humana se prevén problemas respiratorios, oftalmológicos y otros vinculados al consumo de agua contaminada, por la lixiviación de cenizas en los cursos y cuerpos hídricos, además del riesgo para la vida.
A nivel del suelo, se perderá la capa humífera, se eliminan organismos clave para la descomposición de la materia orgánica, entre otras cosas, haciendo el suelo menos fértil.