El director técnico de Palmaflor, Humberto Viviani, aseguró que volver a jugar en el estadio de Quillacollo “es beneficioso” para el plantel porque muchos conocen el terreno, pero aseguró que las dimensiones de la cancha “son pequeñas”.

El plantel Auriverde debutará mañana en el estadio del Valle Bajo, pero en la División Profesional recibiendo al líder Always Ready, desde las 15:00.

“Es una ventaja porque estará la afición de Quillacollo, pero también existe una desventaja porque la cancha es muy pequeña. Algunos equipos pueden meterse en su zona y se complica el partido”, aseguró el estratega que buscará mantener su condición de invicto de local en el torneo Apertura. 

El adiestrador solicitó ampliar las dimensiones de la cancha porque explicó que el terreno tiene 104 metros de largo y 66 de ancho. Por el momento, ese incremento al rectángulo no se realizó.

“Después los camarines, tepeado, duchas y baños están mejor, pero ahora el fútbol es muchgo más rápido, en todo sentido y se necesita una cancha más amplia para que no tengamos complicaciones al final del partido”.

Viviani aseguró que Always Ready “tiene en todas sus líneas a jugadores muy importantes” y considera que deben quitarles el balón porque “juegan muy bien y corren bastante”.

Según el técnico, a los equipos “grandes” se puede atacar durante los 90 minutos, pero en el tiempo suplementario “pueden quedar cara a cara” con el arquero y definen el compromiso.

“Tenemos que jugar como lo venimos haciendo y mejorar muchos más en lo táctico, en lo ofensivo y defensivo. La presión será fundamental para no dejar jugar al Millonario y, de esta manera, neutralizar su buen fútbol”.

El adiestrador aseguró que en su última presentación ante Real Potosí su equipo “fue amplio dominador del match”, pero “algunas situaciones extrafutbolísticas” los dejó con el resultado adverso. 

Para encarar los partidos con mayor convocatoria de público como el que sostendrán ante Wilstermann, él entrenador considera que sería “prudente” jugarlo en el estadio Félix Capriles. 

“Ese tipo de encuentros tiene mucha afluencia de hinchas de Wilster y creo que para lograr una mejor recaudación para el club sería mejor el Capriles”.

Viviani explicó que nunguno de los equipos cochabambinos (Wilstermann, Aurora y Palmaflor) se sienten locales en Cala Cala porque no pueden llevar adelante entrenamientos que permita al jugador conocer el terreno de juego con mayor presición.

Pese a que recien comienza el campeonato, el estratega tiene el sueño de conseguir la clasificación a un torneo internacional para el próximo año.