Moisés Villarroel entró al Monumental de Santiago de Chile cuando faltaban unos 15 minutos para el fin del encuentro entre Wilstermann y Colo Colo. El jugador, de 22 años, no venía sumando minutos de forma regular, pero acertó en el momento preciso, colocó el gol de la clasificación y se ganó el cariño de la hinchada tras meter al Rojo en los octavos de final.

A dos días de la hazaña, Villarroel confesó que concibe ese tanto como el más importante de su vida y también sabe que forma parte de la historia del club aviador.

"Lo de nosotros es para aplaudir porque hicimos una gran Copa (Libertadores) hasta el momento. Estamos enfocados en pasar a cuartos de final", mencionó el futbolista, con relación a la campaña que marca el Hércules en el torneo del continente, en el que terminó como primero de serie, tras los compromisos correspondientes a la fase de grupos.

Moisés relató lo que sucedió entre él y el DT Cristian Díaz en el momento en el que lo incluyó en la cancha. "Cuando me metió el profesor, me dijo que tratara de marcar porque Colo Colo se nos venía y era más para marcar que para jugar. Sufrimos un poquito a lo último", contó el mediocampista, en una nota con La Revista.

Está seguro de que la cara de Wilster ha cambiado para bien, pues ha logrado engranarse mejor y superar los meses de inactividad competitiva. "Nos pusimos bien. Fuimos a Brasil y sacamos un empate, y ahora, en Chile, se demuestra que estamos bien preparados. Hay que cambiar la página de lo que pasó en Chile. Ahora queremos seguir haciendo historia".