La Selección Boliviana de Talla Baja (varones) inició una cruzada para llamar a la reflexión y hacer posible que siga compitiendo tanto en el país como en torneos internacionales. El combinado nacional solicita que cada uno de sus 25 jugadores cuenten con un padrino que los ayude económicamente y les cubra los pasajes hacia Santa Cruz, sede de entrenamientos.

Con la leyenda: "Necesitamos tu ayuda, únete a la campaña y apadrina un seleccionado", comenzó la iniciativa que tiene por objeto mantener vivas las ilusiones de los futbolistas.

"No contamos con apoyo monetario para pagar el traslado a los entrenamientos en Santa Cruz y queremos estar bien preparados en los torneos internacionales que se aproximan, y representar en alto a nuestro país".

En mayo de 2020, los integrantes del equipo atinaron a alistarse físicamente en sus casas. Cumplieron las restricciones a cabalidad, pues la acondroplasia, condición que experimentan, supone mayor fragilidad en caso de sufrir COVID-19.

Olivia Ojopi, coordinadora de la Selección, informó que los entrenamientos son muy importantes, pues se encuentra en puerta la Copa América de Perú. "Requerimos para los pasajes, ya sea en flota o avión. Estamos haciendo alianza con Amaszonas, nos dará tarifas especiales, pero aun así los chicos necesitan tener un padrino. No todos trabajan, es un poco complicado para ellos".

Ojopi indicó que los microciclos se realizan cada 30 o 45 días. "Se viene el amistoso en agosto, con Argentina, y la Copa América en Perú".

La invitación también está enfocada hacia las empresas. "Por ejemplo, que apoyen a unos cinco jugadores. Con eso haremos intercambio publicitario. Tenemos espacio en los uniformes".

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