A la espera de lo que pase mañana domingo con la visita del Manchester City al West Ham, a tres días de enfrentar al Wolverhampton por la Premier (donde pelea a dos fechas del final) y 14 días antes de enfrentar al Real Madrid en París por la definición de la Champions; Liverpool logró este sábado su octava FA Cup (la primera en 16 años) tras superar en el duelo cumbre al Chelsea por 6-5 en penales tras 120 intensos minutos en Wembley.

Los dirigidos por Jürgen Klopp generaron múltiples ocasiones de peligro con disparos a los postes. Los de Thomas Tuchel, aún vigentes monarcas de Europa hasta el lance del 28 entre el Red y la Casa Blanca, también tuvieron sus oportunidades, pero el marcador quedó cerrado, como había ocurrido en el duelo de febrero, cuando estos mismos planteles midieron fuerzas por la Carabao Cup.

Otro "deja vu" fue que dirimieron la corona mediante los lanzamientos desde los 12 pasos y nuevamente, el ganador ha sido Liverpool en una trepidante tanda.

Ambos tuvieron "oportunidad de match point" en esta definición.

En los primeros 10 disparos (cinco por lado), Alisson Becker tapó el disparo de James y Sadio Mané quedó en una "inmejorable posición" para rematar la faena, tal y como lo había hecho con su selección, Senegal, en la definición de la Copa Africana de Naciones y el repechaje a Catar 2022, ambos contra Egipto.

Pero en esta ocasión, Mendy, "viejo conocido" y compañero suyo en el combinado nacional, le amargó la fiesta y dilató la definición. 

En la última parte de la tanda, Becker le tapó el disparo a Mount y el griego Kostas Tsimikas definió con frialdad y le dio la corona a Liverpool, que se "entona" para seguir peleando la Premier con el Citizen y también coge impulso a dos semanas de pugnar la Liga de Campeones contra el Madrid.