Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 09:38

EL CLUB NO RECIBE AYUDA

Ladrones aprovechan cuarentena y roban por tercera vez a Azores

La institución cochabambina de tiro con arco resignó, al menos, siete atriles y pasto sintético que dejó en el terreno donde entrenaban sus atletas, en la zona de Santiaguilla. Los deportistas asumen un golpe duro.
Ladrones aprovechan cuarentena y roban por tercera vez a Azores

Por tercera vez, el club Azores, la única entidad dedicada a formar expertos en tiro con arco en Cochabamba, sufrió el robo de equipamiento deportivo, elementos que fueron adquiridos gracias a los fondos creados por los propios alumnos y al esfuerzo de la entidad.

Liliana Abaroa, vicepresidenta de Azores, explicó que se trata del tercer asalto que experimentan en el terreno situado en la zona de Santiaguilla, al interior de Tiquipaya. En el predio, cedido por la familia Sandi para los entrenamientos de los atletas, estaban dispuestos, al menos, siete atriles y el pasto sintético. Este último era utilizado para establecer la línea de tiro.

“Pensamos que fue en estos días. Para cumplir la cuarentena, no íbamos. Entró la preocupación entre los chicos. Uno de ellos fue en bicicleta hacia el lugar. Se encontró con que no había nada, que nos robaron lo poco que nos quedaba. No se fijó si sacaron algo más. Tenemos depósito, pero no puedo decir si nos quitaron el contenedor. Con la tristeza, el muchacho se fue rápidamente. Hay mucha gente que pasa por ahí y nos ve. Creemos que son personas del lugar”, analizó Abaroa.

El primer robo se dio hace aproximadamente unos tres años, ni bien se instalaron en el terreno. El segundo, cuando se suscitaron los conflictos sociales tras las elecciones de 2019. “Nos sacaron flechas, arcos y herramientas. El otro sucedió durante los bloqueos de octubre pasado”.

Los arqueros de Azores entrenaban allí, hasta antes del confinamiento, ante la dificultad de conseguir un espacio adecuado para llevar a cabo su preparación. Antes lo hicieron en las instalaciones del ex Club Hípico Nacional y en el complejo de Aurora.

Por fortuna, los miembros son “proactivos”, por lo que volver a levantarse del golpe será "un reto factible". “Hay fondos provenientes de nuestros propios bolsillos. Nos sostenemos entre nosotros. Cuesta rehacer las cosas, pero no es imposible”, advirtió Abaroa.

Por su parte, la arquera y también secretaria de Azores, Melina Zurita Santillán, reconoció su desazón. “Son cosas que conseguimos con fondos del club, que usábamos constantemente y que nos duele perder. Cuando logremos volver a practicar, tendremos que mandar a hacer otros con el consecuente gasto. Azores tiene años funcionando (más de cinco), aunque hemos peregrinado de un lado a otro. No contamos con nada de apoyo más que el de nuestras familias. Estas pérdidas son terribles”.

La también deportista Micaela Espinoza compartió el sentimiento. “Es una tristeza insoportable”.