Con el objetivo de hacer un gran torneo y llegar lo más lejos posible en el Mundial de Beach Voley, la dupla boliviana compuesta por Isabel Chacón y María José Galindo entrena hasta doble turno a la semana, en la parte física y técnica.

Las deportistas tienen experiencia en esta disciplina deportiva y también en la especialidad de piso con participaciones en selecciones cochabambinas y nacionales. 

Ambas siguen el plan de trabajo que llevan adelante sus entrenadores Pavel Guzmán y Luis Daniel Valenzuela, quienes afinan el desempeño que pueden exponer en la cancha. 

Los adiestradores y las deportistas tienen el propósito de competir al máximo nivel en el Mundial en las categorías Sub 19 y Sub 21 a disputarse en la provincia de Roi Et, Tailandia en diciembre de este año.

Chacón y Galindo conquistaron la medalla de bronce en el clasificatorio Sub 19 celebrado en Cochabamba en agosto.

Luego del certamen, la dupla boliviana participó en Asunción, Paraguay, donde consiguió el cuarto puesto en el clasificatorio Sub 21 que le otorgó el boleto al mundial de Tailandia en esa categoría.

Las deportistas comentaron que no frenaron el entrenamiento después de lograr ambas clasificaciones, más bien, se vieron obligadas a potenciar sus condiciones físicas y de juego en el rectángulo. 

La anécdota más próxima que recuerdan Chacón y Galindo es que luego del Campeonato Sudamericano de Asunción tuvieron que quedarse una semana entrenando porque no consiguieron vuelos de retorno a Bolivia. “No se perdió el tiempo”. 

Cuando llegaron a su tierra, el trabajo tuvo mayor fuerza, considerando que las posibles rivales en Tailandia están “en un gran nivel competitivo”.

Pese al esfuerzo y empeño que ponen las deportistas para representar de la mejor manera a Bolivia, tienen como principal obstáculo el tema económico.

La principal preocupación de las deportistas es adquirir los pasajes hasta la ciudad sede. Por el momento, esos recursos deben ser cubiertos por ellas. 

“Por ahora no hemos recibido la confirmación de ninguna institución gubernamental ni privada para el apoyo económico (…), hacemos diferentes actividades para recaudar el dinero que necesitemos para juntar esos recursos”, declaró Galindo, haciendo un llamado a las autoridades de Gobierno y empresarial para respaldar el esfuerzo que realizan las cochabambinas.

A pesar de ese obstáculo, Chacón y Galindo tienen como principal propósito “hacer un buen papel en las dos categorías (Sub 19 y Sub 21) y, en lo posible, clasificar a la fase de grupos”. 

Por su parte, el entrenador Pavel Guzmán manifestó que “tienen mucho volumen de entrenamiento, en estos meses, para llegar en óptimas condiciones tanto en lo físico como en lo técnico”.

Dentro de las alternativas técnicas que tienen está analizar el desplazamiento y la forma de juego que tienen las posibles rivales que expondrán su máximo nivel internacional en Tailandia.

Chacón y Galindo tienen el roce internacional a nivel sudamericano, pero la dupla busca estar a la altura del resto de los países. 

“Todos los partidos que ganamos en Asunción fueron al tercer set, ahora estamos con los ojos tapados para los países fuera de Sudamérica, pero sabemos que van con un nivel muy alto”, mencionó Chacón, haciendo referencia al nivel con el que esperan encontrarse en los torneos en Tailandia.

El reto es muy grande para ambas deportistas ya que, si bien ambos mundiales se juegan de manera consecutiva y en la misma sede (Roi Et, Tailandia), se trata de dos campeonatos mundiales distintos y en diferentes categorías.

“Se trabaja la potencia y velocidad, estuvimos con cargas fuertes, pero se bajaron porque las dos deportistas son parte de la selección cochabambina de voleibol de piso”, dijo Luis Daniel Valenzuela, preparador físico de la dupla, quien además es entrenador del recordista nacional y velocista olímpico Bruno Rojas.

Las deportistas tienen sesiones de gimnasio y de saltos los días lunes y miércoles. Para el viernes realizan velocidad y cambios de dirección. 

“Luego de conseguir su clasificación al Mundial, ellas estaban en un buen nivel físico (85% aproximadamente) y ahora se trata de afinar para que estén al 100% de sus condiciones”, acotó Valenzuela.

Resaltó que “tiene el compromiso personal y con el país” porque cumplen con las diferentes instrucciones y recomendaciones en la dieta. 

El reto llega a ser incluso mayor para ambas debido a que deben combinar una preparación intensa con sus estudios. 

“Es complicado organizar los horarios, pero realmente vale la pena”, comentó Chacón, quien cree que los esfuerzos son recompensados luego. 

“Creo que vale la pena todo el esfuerzo que haces porque eso se reflejará en la cancha”, añadió Galindo, quien busca superar los desafíos y dificultades que tiene en el camino para representar al país.

Para las cochabambinas será un gran reto y para el país la posibilidad de “brillar” en Tailandia.