Acabó una era difícil de olvidar para el FC Barcelona. De manera forzosa, según reflejaron medios de comunicación internacionales, el vínculo entre el club catalán y el argentino Lionel Messi tuvo que llegar a su fin hoy jueves, después de 34 títulos y 672 goles en 17 temporadas.

Allá por el año 2000, el rosarino descollaba en las divisiones menores de Newell's Old Boys. A pesar de su destreza, River Plate no quiso ficharlo por no estar de acuerdo con el "pedido del padre del genio rosarino de obtener, a cambio del fichaje, casa y trabajo", según retrató Revista 1986.

El FC Barcelona se hizo cargo de ese tema y del tratamiento con hormonas que Messi necesitaba para crecer. El año del debut en la profesional del Barcelona tuvo lugar en 2004. Su primer gol fue ante el Albacete luego de una asistencia de quien era el ídolo del momento en la escuadra culé, Ronaldinho.

Cuando la estela del brasileño se apagó, el argentino asumió el rol de ídolo y lo demás es historia. Logró 10 Ligas, 7 Copas del Rey, 4 ediciones de la UEFA Champions League, 3 Supercopas de Europa, 3 Mundiales de Clubes y 6 Balones de Oro. 

Más allá de los constantes fracasos a nivel europeo (cero trofeos desde 2015) en el último tiempo, Messi dejó una huella indeleble y un legado que perdurará por mucho tiempo en las retinas de los aficionados del Barça. Recientemente, el 10 de julio pasado, logró quitarse por fin la espina de no haber ganado títulos con su selección tras conquistar la Copa América, venciendo a Brasil por 0-1 en la final.

¿Qué deparará el futuro del astro albiceleste?