Hablar de la democracia es uno de los temas acerca de los cuales  le gusta hablar al  presidente Evo Morales Ayma, para quien ésta se halla más consolidada que nunca en el país, tras la apertura a los sectores indígenas y marginados que antes no tenían voz en la toma de decisiones.

Sin embargo, conseguir una entrevista con el mandatario del Estado Plurinacional, que llegó a la Presidencia el 22 de enero de 2006 luego de ganar los comicios con un histórico 53.7 por ciento en 2005 y ser reelecto en 2009 con 60 por ciento, es un tanto complicado por una agenda diaria que lo suele llevar, a veces, hasta a cuatro regiones distintas del país para entregar obras o inaugurar proyectos.

La cobertura a uno de sus viajes y la suerte de viajar en el mismo helicóptero de retorno del municipio de Sicaya (provincia Capinota) a Cochabamba permitió conversar en pleno vuelo con Morales aprovechando algunas pausas entre las múltiples llamadas que atendía y hacía, y la conversación y , a veces, el cuestionamiento  al gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo,  sobre los avances de obras.

Con su ya conocida forma coloquial de llamar  “compañera”, Evo Morales inicia la conversación hablando de la   profundización de la

democracia sobre todo en su Gobierno,  que  llevó a cabo un

referendo para consultar a los bolivianos si estaban de acuerdo o no con las autonomías y la consulta para aprobar la nueva Constitución Política del Estado, un hecho que él considera es una democracia directa.

A lo largo de la entrevista, el

Presidente se muestra tranquilo y sonriente exponiendo los logros de su Gobierno y resaltando la participación y la decisión.

OPINIÓN: Este año se cumple 30 años de la recuperación de la democracia en Bolivia  ¿qué significa para usted este hecho?

EVO MORALES (EM).- Se recuerda 30 años de democracia, no para mí sino para el pueblo boliviano. Sin duda es un hecho histórico para todos nosotros.

Después de tanto conflicto político y gobiernos de facto en Latinoamérica y en Bolivia, el 10 de octubre de 1982 por fin se recupera la democracia, proceso que se consolida y se profundiza, ahora,  gracias a la lucha del pueblo boliviano y de los distintos sectores, de las mujeres mineras y del proyecto campesino, entre otros.

Ahora,  lo que hay que hacer es reflexionar

acerca de que esos golpes de Estado no solamente han sido provocados por intereses de grupos de Bolivia sino que han sido impuestos desde Estados Unidos. Por ejemplo, a mí me cuentan algunos exiliados: “Evo, solo no hay golpe de Estado en Estados Unidos, porque no hay un Embajador de Estados Unidos en Estados Unidos” (se ríe).

Cuando en Latinoamérica el pueblo se organiza en base a sus principios y a sus

valores para liberarse democráticamente y gana  con un partido de líderes izquierdistas, de líderes antiimperialistas,

anticapitalistas, comienzan muchos a hablar de golpes de Estado, y hay muchos intentos de golpes de Estado impuestos desde arriba. Sin embargo, la democracia que vivimos en Latinoamérica es una democracia de Estado, de los pueblos especialmente. Tiene base en los principios y valores que nos dejaron nuestros antepasados.   

Por supuesto, hay también presidentes procapitalistas, proimperialistas como resultado de la democracia, lo cual respetamos.

Frente a esos presidentes que han inaugurado una democracia de los pueblos ha  habido intentos de golpes de Estado desde la década del 90, a Chávez, por ejemplo, (Hugo Chávez, presidente de Venezuela), a un presidente, a un comandante, a un militar antiimperialista y anticapitalista intentaron darle un golpe, pero el pueblo se levantó para que no se acabe su gestión.

Después viene el golpe de Estado en Honduras consumado, aunque luego hubo elecciones y ahí el imperio nos ha ganado.

También ha habido intento de golpe de Estado acá (Bolivia) en 2008, pero fracasaron. Hubo intento de golpe de Estado en Ecuador, fracasaron, ahora hay otra clase de golpe, el golpe congresal como en Paraguay.

Por tanto, ¿qué siento, qué pienso? Pese a estas dificultades, las democracias en  Latinoamérica van consolidándose, y si hay  golpes de Estado es que hay y han habido  movimientos sociales en una lucha por su identidad, por sus recursos naturales y por la democracia. Ahora, eso se consolida en Latinoamérica, ésa es la nueva historia y estamos viviendo esa democracia en Latinoamérica.

En Bolivia es mucho más profundo, pasamos a la democracia participativa y a la democracia decisiva ¿Acaso antes había

referendo?  No había.

¿Acaso antes los más marginados, los  pueblos indígenas tenían su representación en la Asamblea Nacional, en la Asamblea Departamental?  No había. Además de eso, una elección directa en las asambleas departamentales, es decir, es un modelo de democracia, por eso siento que no solamente hay que socializar sino seguir profundizando los encuentros plurinacionales.

Siento que hemos creado otra democracia participativa en temas decisivos sobre políticas sociales, políticas económicas y políticas estructurales.

O.- ¿Cuál es la diferencia de la democracia de su Gobierno en comparación a los anteriores?

EM.- Primero, mediante la Asamblea

Constituyente hemos incorporado la representación indígena y de los sectores más abandonados y eso es la democracia

participativa y decisiva. Creo que ésa es la principal diferencia con las anteriores democracias y gobiernos.

Antes, solo era representativa (la democracia) y no participativa, antes no había

referendo, por ejemplo. Antes, el pueblo podía elegir a sus autoridades, ahora puede revocar a sus autoridades. Hay una profunda diferencia, un cambio de carácter estructural.

O.- ¿Aún falta consolidar la democracia en el país?

EM.- En Bolivia la democracia está

consolidada, por eso el último intento de golpe de Estado de 2008 fue un rotundo fracaso. Además de eso, cuando uno está en democracia hay resultados, se transparenta el manejo, las rendiciones de cuentas que nunca había antes y así se consolida el proceso.

Todo eso compromete al pueblo a seguir profundizando la democracia. ¿Cuál sería la forma de profundizar? Yo quisiera que haya unas dos semanas de debate nacional y calculo que será el último mes del año (2012) o las primeras semanas del año venidero. Será un debate  desde las comunidades, desde las provincias, desde las alcaldías, desde los

ayllus, un debate sobre políticas; este debate va subiendo a las provincias, de las provincias a los departamentos y de los departamentos a nivel nacional.

Al margen de la elección de autoridades, al margen de las asambleas departamentales, al margen de la Asamblea Nacional, la participación del pueblo en la política,  producto del debate, eso es lo que pienso que debe haber.

Y eso significa profundizar el proceso de cambio desde las bases, creo que ésa es una forma de consolidar esta democracia que en Bolivia tiene las características que he mencionado, directa, participativa, que se basa en las decisiones del pueblo.   

O.- ¿Qué podría amenazar a la democracia?

EM.- Intereses externos, pero por ahora no los hay de manera directa.

Pero ¿qué hace para crear intervencionismo el imperialismo?  Lo que hace es crear conflictos internos de grupos de diferentes

nacionalidades,  grupos étnicos, por ejemplo. En otros continentes hacer aparecer un país confrontado entre grupos étnicos y  dice después: “Ah! Cuerpo de Paz”, ¿verdad?, ése es el nuevo instrumento del imperio, enfrentarnos e intervenir. Yo me acuerdo, este año por ejemplo, cuando teníamos conflicto con los médicos, algunos analistas, supuestos

analistas, pero que sí son de la derecha, ¿qué decían, qué pedían cuando escribían en los periódicos?  “Presencia de los Cascos Azules”. Entonces, ¿qué puede hacer peligrar a la democracia?  Los intereses de grupos de hacer aparecer a un país como confrontado internamente, y ahí Estados Unidos planifica la intervención, intervención militar. Hay mucha conciencia del pueblo boliviano. Una cosa son las reivindicaciones, otra cosa son las acciones políticas que toman y esas acciones, esos conflictos son aprovechados por el

imperialismo norteamericano.

El vuelo llega a su fin, en la conversación quedan algunas preguntas a las cuales se ha referido el Presidente en los discursos que pronuncia en actos públicos.  Por ejemplo, el mandatario sostiene que se debe gobernar escuchando al pueblo, pero también reconoce que algunos sectores sociales defienden más sus intereses sectoriales que los intereses del pueblo o del país.  “Gobernar obedeciendo al pueblo es lo que haremos siempre pero a un pueblo, no a un sector que  sólo piense en sus intereses”, dice.

- ¿Qué esfuerzos hace su  Gobierno para formar nuevos líderes populares y fomentar una auténtica participación del pueblo? Es una pregunta que suele escuchar el

Presidente, y responder también. “En solo seis años han surgido en el país líderes nuevos y jóvenes, que  tienen unos 20, 30 años; ahí están, por ejemplo, jóvenes alcaldes, gobernadoras, senadoras y diputadas y diputados ocupando cargos de decisión, y eso ha sido posible en este proceso de cambio”. 

- ¿Evo Morales irá a la reelección en 2014?

El Presidente se ríe frente a esa pregunta “¿Por qué están tan apurados?”, pregunta a sus bases, y dice que no hay impedimento legal para volver a postularse nuevamente, pero con una agenda intensa que cumplir diariamente de lunes a domingo el tema de las elecciones es un horizonte muy lejano. “Compañeros y compañeras, no podemos pensar en las elecciones futuras cuando tenemos en este momento tantas cosas que atender que son más urgentes”, afirma. Por eso digo –subraya- hay algunos dirigentes que piensan más en las próximas elecciones antes que en las futuras generaciones”.