Tajy, el nombre guaraní de la agrupación, no es otra cosa que la manera de resumir la esencia del correntino, remitiendo la idea a la figura del árbol emblemático de la región litoraleña argentina. Aquí, en Bolivia, dicho árbol es conocido como tajibo.

Alejandro Ramírez, apodado como Tato en el medio artístico, se encarga de aclarar el concepto no de entrada, sino al filo de la entrevista con OPINIÓN. Ese detalle no podía quedar suspendido en el aire para quien entiende que la música es el mejor puente para interconectar la cultura sudamericana, tan rica en tonalidades, acentos y matices.

La agrupación, que forma parte del proyecto Ruta Andina impulsado por la productora boliviana Amalia Canedo, brindará hoy un concierto virtual, desde las 21:00, a través de su canal de Youtube (Tajy Oficial), de acuerdo con lo anticipado por la gestora cultural.

Conmemorará, así, sus siete años en el ambiente musical, tiempo en el que el trío, conformado por el acordeonista Ramírez, la violinista Belén Arriola y el guitarrista José Víctor Piñeiro, se encargó de enaltecer la idiosincrasia del Litoral, del hombre y la mujer provincianos.

El show vía streaming expondrá un repaso por la carrera de Tajy, que cuenta con los discos Florece (2014), Acuarela (2016) y Canciones como semillas (2019). Ramírez adelantó: “La idea es hacer temas de nuestros discos, tanto de producción propia como participaciones. Estará bien la revancha en un mes para incluir otras canciones”.

En el concierto también habrá un homenaje a Luis Landriscina, conocido cuentista, actor y humorista argentino. “Hicimos una investigación sobre sus obras musicales y poemas para llevarla a un disco junto a un gran poeta, que es Juan Pablo Barberan. Todo eso estará en el repertorio del concierto aniversario”.

Tato aprovechó para lanzar una crítica dirigida hacia la música envasada que viene, específicamente, de países como Estados Unidos. Lamentó que, a veces, suela suceder que las propuestas artísticas de sitios cercanos no sean consumidas en el grado que merecen debido a la “masiva comunicación”. 

“A lo largo de los años, el público, en general, desconoce lo que sucede en lugares bastante cerca. Es una consecuencia de la masiva comunicación y la forma de acaparar la audiencia musical de empresas trasnacionales, que envasan las cosas de Estados Unidos y nos las enchufan”.

Por último, confesó que a Tajy le agradaría tocar en el valle. “Nos encantaría ir a Cochabamba”, dijo. Todo es posible. Resta que la crisis pandémica sea solo un recuerdo.

Los que deseen ser partícipes del recital de esta noche, pueden adquirir sus entradas por medio de Mercado Pago (3794525060) o a través de una transferencia al CBU 0940099360002948470028.