Después de haber triunfado con cuatro galardones — mejor guion, dirección, fotografía y sonido — en el Festival de Cine Entre Largos y Cortos de Oriente en Venezuela y ser exhibido en los festivales Internacionales de Santa Cruz (Fenavid) y el Diablo de Oro en Oruro, el mediometraje documental “Sin Aroma” se podrá ver en Cochabamba hoy jueves como parte del Ciclo de Cine Escaramuza 2022. 

La proyección empezará a las 19:00 horas en La Troje (avenida Víctor Ustáriz kilómetro tres y medio a tres cuadras de la Beijing). El ingreso tiene un costo de 10 bolivianos y después de la exhibición los asistentes tendrán una charla con el director y escritor del filme, Dorian Magne. 

“Sin aroma” muestra la pérdida de sensibilidad en el ser humano y cómo este llega a construir una personalidad en base a su entorno social. El director resalta el mensaje de la influencia de la sociedad en los bajos mundos cochabambinos iniciado con la frase: “El hombre nace bueno y la sociedad lo corrompe” del filósofo Jean-Jacques Rousseau.

Para llevar adelante su tesis, Magne muestra dos historias: una sobre un carnicero de cerdos, filmado principalmente en su labor en el matadero y otra sobre un preadolescente consumidor de pasta a base de cocaína. Su nombre es José Edwin Gutiérrez Caballero, vive dos años en la calle y está a punto de cumplir los 15 años. Viene del trópico y se autodefine como un consumidor de “tula”, como él la llama. 

Su único sustento económico es extender la mano para que la gente le regale monedas o, a veces, realizar una carrera de manos, hurtando una billetera o algo de valor para sobrevivir. Es la historia principal con la que Magne enseña una visión pesimista y oscura de la sociedad donde el destino del hombre es absurdo y solo queda esperar por algo mejor. 

En una entrevista para La Ramona, Magne contó que la película salió mientras rodaba otra, una idea primaria en la que buscaba enseñar una “sinfonía de la ciudad” de Cochabamba. Sin embargo, durante el rodaje, vio bajar del micro a “un chico, con una frazada puesta y estaba vendiendo refresco, y le compré, y empezamos a entablar conversación de cómo es la calle y me comentó que consumía pasta base y ese fue el detonante y el punto de partida del documental y, de ahí, salió lo que es “Sin Aroma”, de lo que es él, y empezamos a enfocarnos netamente en ese nuevo proyecto”.