Opinión Bolivia

  • Diario Digital | martes, 23 de abril de 2024
  • Actualizado 03:42

“Portales, música y espacios”, sesiones de música en vivo en el Centro Simón I. Patiño

Dos bandas nacionales, enmarcadas en géneros electrónicos, de experimentación y fusión fueron los encargados de inaugurar el espacio.
El músico cochabambino Franz Antezana en vivo en uno de los pasillos del museo del Centro Simón I. Patiño
El músico cochabambino Franz Antezana en vivo en uno de los pasillos del museo del Centro Simón I. Patiño
“Portales, música y espacios”, sesiones de música en vivo en el Centro Simón I. Patiño

El Centro Simón I. Patiño en Cochabamba realiza una serie de presentaciones de música en vivo en instalaciones de la central ubicada en la calle Potosí, en el norte de la ciudad, llamadas “Portales, música y espacios”, con el afán de brindar un lugar para reactivar y conocer músicos locales.

“Con la pandemia, los espacios de los museos han quedado vacíos de sus públicos habituales. Retomar ese espacio desde la casa, desde otros lugares gracias a la virtualidad, es el objetivo del museo #PalacioPortales, no solo para conservar y resaltar el espacio vivo de los museos sino como el pretexto para hablar de patrimonio histórico, cultural y sonoro”, indica un comunicado del Centro.

El primer episodio lo inauguró el músico Franz Antezana, más conocido como Cassettes Have Become Extinct, un artista cochabambino inmerso en la experimentación con sintetizadores modulares y máquinas de ritmo o secuenciadores.

El segundo episodio fue copado por la artista Alejandra Lanza con su banda Timpana, integrada por Luciel Izumi, Cuco Pacha Kuti y Espectro Polar, quienes interpretaron los sonidos híbridos de Lanza en uno de los salones del museo de Patiño.

La producción del evento cuenta con el apoyo de Omni Estudios, el artista Ozzo Okumari, el fotógrafo y músico Steve Camargo, el sonidista Édgar Arduz y la colaboración del equipo de Arterias Urbanas, además de otros artistas e instituciones.

El sector artístico, sobre todo del ámbito musical, ha sufrido las inclemencias de la pandemia del coronavirus por más de un año, quedando sin la posibilidad de normalizar la atención en salas y locales de conciertos ni de gestionar espacios propios. En este contexto, la propuesta de Simón I. Patiño es bastante alentadora porque además de brindar visibilidad y la posibilidad de tocar, los músicos reciben un trato singular y de calidad con una producción destacable.