Portales abre visitas a la muestra ‘Don Simón y Doña Albina’

El museo Palacio Portales (avenida Potosí No. 1450) ha implementado un nuevo espacio expositivo que es parte del recorrido a la casa de Simón I. Patiño. Se trata de la exposición permanente dedicada a la vida de la familia Patiño y la Fundación Universitaria Simón I. Patiño, que titula “Don Simón y Doña Albina, Horizontes Compartidos” y consta de una parte fotográfica que sigue la vida de la familia Patiño, su participación de la vida social de las ciudades donde vivieron, su implicancia y apoyo en la contienda de la Guerra del Chaco y la devoción religiosa. Una segunda parte de la exposición es más pedagógica y hace hincapié en los hitos más importantes de la Fundación Universitaria Simón I. Patiño dedicada a la pedagogía, la salud y la ecología.
La vida del empresario minero Simón I. Patiño (Cochabamba, Bolivia 1860 –Buenos Aires, Argentina 1947) es ampliamente conocida por su relación con la minería y sus logros en esta área, pero es también importante la presencia de la familia en su carrera y profesión. Es por eso que se hace énfasis en su matrimonio con Doña Albina Rodríguez (Oruro, Bolivia 1873 – París, Francia 1953) y su vida juntos. “La muestra tiene la intención de revalorizar la figura de Doña Albina que, como se verá, emerge como compañera incondicional del esposo, boliviana solidaria con su patria, mujer sensible a los problemas de la infancia y la educación”, señala una nota de prensa difundida por la institución.
La creación y desarrollo de la Fundación Universitaria Simón I. Patiño (FUSIP) sigue el ideario y la sensibilidad del industrial Simón I. Patiño que, junto con su esposa, buscaron una integración horizontal de desarrollo de toda la sociedad boliviana prestando atención a aquellos problemas más álgidos como eran la educación y la cultura, la formación profesional, la salud y la alimentación.
La Fundación se creó en 1931. Simón I. Patiño solicita al pedagogo belga George Rouma (fundador de la Normal de Sucre) proyectar un plan para mejorar la educación de los profesionales bolivianos. En base a la propuesta de Rouma, el industrial Simón I. Patiño crea la Fundación Universitaria Simón I. Patiño (FUSIP) para la promoción de la educación de calidad para la juventud boliviana. La Fundación comienza a funcionar cuando se otorgan las primeras becas universitarias a estudiantes bolivianos para estudiar en Europa. Desde esa fecha a la actualidad la Fundación ha creado el Centro Universitario Simón I. Patiño (1961), el Centro de Pediatría Albina R. de Patiño (1968), el Centro Pedagógico y Cultural Simón I. Patiño (1969), el Centro de Investigaciones Fitoecogenéticas de Pairumani (1970), El Espacio Simón I. Patiño (1984) y el Centro de Nutrición Infantil Albina R. de Patiño (2002), entre otros.