Después de tantos meses de confinamiento, la música se constituye en un medio muy efectivo para sanar y calmar ansiedades. Es así que al más puro estilo de los conciertos que se realizan al aire libre en el extranjero, Adolfo Taborga, más conocido como “Fito violinista”, ofrece a la población por segunda vez la oportunidad de disfrutar en familia, en pareja o entre amigos, de una hora de música ejecutada en el violín, con repertorio variado, en un “Teatro verde”, hermoso y de contexto abierto donde la naturaleza nos abraza y transmuta.

Esta actividad que de ahora en adelante formará parte del futuro de la cultura en nuestra ciudad, podrá magnificarse con la alta calidad que caracteriza a las empresas patrocinadoras del evento: Bose en el sonido y Epson en la proyección de imagen. 

La población necesita de la cultura ahora más que nunca y de la música en especial ya que ella nos hace resilientes, nos da esperanza y nos recuerda que no estamos solos.  Por ello, “Fito violinista”, que el año pasado durante el período más duro de la pandemia brindó su música a Cochabamba desde lo alto de un edificio y recorrió las calles de la ciudad tocando el violín sobre una camioneta, ahora nos deleitará con conciertos gratuitos que se realizarán en espacios abiertos como parques y plazas de la ciudad, a los cuales el público asistente tiene la posibilidad de llevar su silla plegable y ubicarse en el lugar de su preferencia.  

Hoy, como nunca antes, es imprescindible proteger y salvaguardar la diversidad de las expresiones culturales, con el apoyo de gobiernos, las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado, con medidas adaptadas a cada contexto. Por ello, se espera que para siguientes conciertos, y a fin de llegar a la mayor cantidad de público en los diferentes municipios, se unan más empresas auspiciadoras para apoyar este emprendimiento altruista. 

El segundo concierto se llevó a cabo el sábado 27 de octubre en el teatrín del “Parque del Arquitecto”*, ubicado en la avenida America Este, esquina Quijarro. En una segunda etapa y en función de nuevos patrocinios, “Fito violinista” pretende extender la actividad a otras ciudades del país.  

ADOLFO TABORGA ALVAREZ

“Arquitecto de profesión y músico de corazón”, así se describe Adolfo Taborga Álvarez, fundador y ex director de la Fundación Sinfónica Cochabamba. En el campo musical tocó el violín desde su adolescencia y al llegar a los 16 años fue invitado a formar parte de la Orquesta de Cámara Laredo. Una vez terminados sus estudios en el Instituto Laredo a los 18 años de edad, tomó un taller de cuerdas y música de cámara, dictada por el profesor Richard Sieber (USA); quien le dio su primer impulso en la ejecución musical grupal. Adolfo Taborga, recién salido bachiller, fue invitado por Dn Franklin Anaya Arze a ser parte del plantel docente del Instituto Laredo y de igual manera sucedió tiempo después con el Conservatorio Man Césped a invitación del Maestro Koichi Fujii (Japón). En ambas instituciones ejerció la Jefatura del área de cuerdas y la docencia por mas de una década. 

A tiempo de especializarse en su formación como violinista en diversos cursos del extranjero, participó como representante boliviano en la Orquesta de Jóvenes del MERCOSUR en sus tres versiones realizadas en Brasil, Uruguay y Argentina. Un año más tarde lo nombraron Presidente y Concertino de la Orquesta de Cámara Municipal Cochabamba institución que evolucionó a Orquesta Sinfónica con su aporte, ocupando la Dirección ejecutiva por 14 años y con la que además de la difusión de la música logró eventos de intercambio con USA, Brasil, Chile, Paraguay, Venezuela, Perú, México y Alemania, en beneficio de los músicos jóvenes de Cochabamba.

En 2005 creó la Fundación Sinfónica Cochabamba (FSC), la cual se constituyó en referente de institución educativa musical sin fines de lucro con un componente fuerte de inserción social, donde la música se constituyó en la poderosa herramienta de transformación que llevó a la institución a ser la única que a la fecha ha logrado la formación musical en municipios de varias provincias a través del trabajo orquestal (Capinota, Sacaba, Vinto, Itocta y Cercado) llegando a mas de 350 niños y jóvenes que no hubieran tenido la oportunidad de desarrollar sus potencialidades artísticas en los diferentes instrumentos de la orquesta sinfónica.

Actualmente, Adolfo Taborga, y por 32vo año consecutivo, se dedica a la clase privada de violín transmitiendo a sus estudiantes su experiencia y todo el conocimiento heredado de su Maestro y mentor Jiri Sommer (República Checa) de quien tuvo el gran privilegio de recibir gran parte del conocimiento que actualmente imparte.