Compadres es una fiesta que refuerza las relaciones sociales y genera un ambiente distinto, rompiendo la cotidianidad de los todos los espacios de confraternización.  

Algunas investigaciones señalan que esta fiesta se originó en los valles de Cochabamba, específicamente en Mizque, llegó a Tarija se expandió al resto del país e incluso hasta las zonas periféricas del norte de argentina como Jujuy, Salta y Orán.

Esta celebración, previa al carnaval, era muy celebrada en antaño, siendo una costumbre visitar a los compadres llevando distintos productos agrícolas. Actualmente la fiesta fue adaptada y es celebrada de manera más general, en todos los estratos sociales, inclusive el hecho del compadrazgo se ha extendido a más que el mero hecho de tener ese vínculo.

La relación de compadrazgo está basada en una profunda relación de amistad. Se supone que cuando alguien elige al padrino para su hijo o hija, lo hace luego de una selección exhaustiva, porque se convertirá en una figura importante para el niño.

En la ciudad, la fiesta de los compadres empieza desde tempranas horas de la mañana en los mercados 25 de Mayo y Calatayud y se extiende hasta largas horas de la noche en varios sectores de la ciudad. La comida del día es el puchero.

Inicio del Carnaval

En contacto con OPINIÓN, el docente y sociólogo de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), George Komadina, indicó que las fiestas en Bolivia de origen Andino que se han superpuesto con las fiestas católicas modulan el tiempo. “Como el caso del Carnaval que implica una rotura con la vida cotidiana, se refuerza las relaciones sociales y son celebradas en todos los estratos sociales y eso es inmanente al tejido social”.

Sobre su procedencia, Komadina, comentó que el carnaval es una festividad proveniente de Roma que se ha superpuesto a través de un sincretismo religioso. “Pero por supuesto esta fiesta en nuestro país tiene otras connotaciones”.