El epidemiólogo Virgilio Prieto explicó que asistir a una fiesta es de alto riesgo para contagiarse de COVID-19, ya que las posibilidades de contraer el virus son del 51%, más aún por el comportamiento de la gente después del consumo de bebidas alcohólicas.

“Estudios realizados en España y en Italia han demostrado que el 31% de los contagios ocurren en reuniones familiares y el 51% en reuniones sociales masivas (…), ahí no sabemos quién es asintomático, quién es portador o está contagiado”,  aseveró Prieto.

Según el epidemiólogo, hay una alta probabilidad de que en Bolivia circule la variante Delta y, por ello, el riesgo de contagio es aún mayor en este tipo de acontecimientos.

Las posibilidades mayores de contagio también se hallan en ambientes cerrados, como ocurre en locales o domicilios, lugares que son usados para el consumo de bebidas alcohólicas después de las fiestas.

Añadió que el riesgo en sitios sin ventilación es mayor. “Según el estudio, si las personas se duermen sin barbijo y hay una sola infectada, en dos horas y sin ventilación, más del 80% de las personas está expuestas a la transmisión del virus”, detalló.

Si en el lugar cerrado hay más personas, la potencialidad de contagio es aún mayor. Prieto recomendó reuniones al aire libre, de corto tiempo e imprescindiblemente con barbijo.