Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 18:25

YPFB afirma que empresas de cinco países están interesadas en la urea boliviana

“Se escucha hablar en los medios y a personas que la urea no tiene mercado, pero eso es lo más falso porque este fertilizante es muy requerido en cualquier parte del mundo. Su consumo y demanda crece por la crisis alimentaria que tiene el planeta".
La planta de urea y amoniaco situada en Bulo Bulo, municipio de Entre Ríos en el Trópico de Cochabamba.
La planta de urea y amoniaco situada en Bulo Bulo, municipio de Entre Ríos en el Trópico de Cochabamba.
YPFB afirma que empresas de cinco países están interesadas en la urea boliviana

Empresas de Brasil, Argentina, Paraguay, Perú y Uruguay están interesadas en comprar hasta 1,4 millones de toneladas de urea, una vez que la Planta de Amoniaco y Urea (PAU) vuelva a operar, informó la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).

La empresa, mediante nota de prensa, agregó que esas firmas no son las únicas interesadas, sino también se suman empresas de otros continentes que evalúan adquirir este fertilizante.

“Nuestra capacidad anual de producción al 100% es de 650 mil toneladas y de esa cantidad, la demanda del mercado interno es de 20 mil a 25 mil toneladas. El restante queda para la exportación y representa casi la mitad de intención de compra que tenemos hasta el momento”, indicó Luciano Montellano, Vicepresidente de Operaciones de YPFB.

Montellano negó las versiones de que la urea no tendría mercado internacional. 

“Se escucha hablar en los medios y a personas que la urea no tiene mercado, pero eso es lo más falso porque este fertilizante es muy requerido en cualquier parte del mundo. Su consumo y demanda crece por la crisis alimentaria que tiene el planeta. Se necesita producir más y mejores alimentos (…). Entonces, la demanda de urea no es un problema y peor en Sudamérica, pues tenemos a Brasil, que es uno de los más grandes compradores del mundo”, sostuvo.

La Planta de Amoniaco y Urea dejó de funcionar durante el Gobierno transitorio en 2020. En cuanto a los trabajos para su reactivación, el Vicepresidente de Operaciones de YPFB señaló que se ha tenido un avance muy alentador y positivo sobre los principales equipos.

Según YPFB, considerando la creciente demanda internacional y el desarrollo intensivo de la agroindustria nacional, se estiman ingresos anuales de 120 a 140 millones de dólares. 

“Con la estructura de costos optimizada se estima un rédito operativo de 30% a 35%. La estabilidad en las operaciones está muy vinculada a una masiva logística. La corriente de exportación jugará un papel preponderante en la recuperación del negocio”, agregó Montellano.

Internamente, la PAU genera alrededor de 300 fuentes laborales directas y aproximadamente unas 70 indirectas, informó la estatal. “El mayor impacto se da en las fuentes laborales indirectas externas ya que se potencian actividades de transporte, estiba, comercializadores mayoristas, minoristas, intermediarios, agricultores, pecuarios, agroindustriales de pequeña y gran escala con una estimación inicial de entre 2.500 a 3.500 trabajos indirectos. Cifras que se multiplicarán a medida que el agro se desarrolle”, indicó el ejecutivo de YPFB.