Víctimas de violencia, robo y deudas impagas inundan las redes sociales, con el fin de buscar justicia y llamar la atención de las autoridades , pero sobre todo de prevenir a otras personas respecto a determinados hechos.

“El confesionario”  es el nombre bajo el cual se creó una página de denuncias en Facebook, en la que “estallaron” numerosos testimonios de víctimas de violencia sexual y acoso protagonizados por estudiantes y docentes de una universidad privada de la ciudad de La Paz. Una de ellas llegó incluso a conseguir la detención preventiva de uno de los implicados, a raíz del significativo número de testimonios publicados en su contra. Carlos D.A.A. de 30 años de edad fue enviado al penal de San Pedro acusado por el delito de Abuso Sexual que habría cometido en contra de una universitaria, en el marco del caso denominado “Confesionario UCB”.

La abogada especialista en casos de violencia y acoso sexual, y representante de Voces Libres en Cochabamba, Mercedes Cortez, explicó que el Ministerio Público puede iniciar ciertos procesos de oficio, siempre y cuando se identifique un número considerable de víctimas. Pues, al ser denunciado en redes sociales y no formalmente el hecho podría quedar en la impunidad.

El comunicador especialista en redes sociales y marketing digital Enrique Revollo recomendó a los internautas formalizar las denuncias ante las autoridades en justicia, aunque dio el visto bueno a este tipo de publicaciones en Facebook como una herramienta de prevención y advertencia para la población.

SÍNTOMAS DE INJUSTICIA

Revollo indicó que uno de los motivos por los cuales las víctimas acudan, en primera instancia, a las redes sociales puede ser la falta de atención que las autoridades ponen en ciertos casos.

“Estas denuncias son un mal síntoma, una muestra de que en ocasiones las redes pueden ser una mejor herramienta que las mismas instancias correspondientes”, señaló.

Cortez, por otro lado, manifestó que la burocracia, el tiempo y el alto precio en honorarios de abogados son las principales causas para que muchas personas busquen justicia en redes sociales, o al menos llamar la atención de las autoridades.

VALOR LEGAL

Una denuncia sobre violencia sexual registrada en la ciudada de La Paz hace casi un mes, implicando a un conocido ilustrador, se viralizó rápidamente en la web, después de que la víctima decidió publicar el hecho en su cuenta personal de Facebook, junto con fotos de las lesiones provocadas por sus agresores (2).

Sin embargo, no se tiene constancia de que esta publicación haya sido tomada en cuenta por las autoridades policiales o judiciales en la investigación, toda vez que la mujer acudió también a instancias formales despues de postear el relato del hecho.

Para Cortez las publicaciones en redes no tienen valor legal. Sin embargo, aclara que la persona responsable de la publicación y propietaria de la cuenta debe ser quien denuncie el hecho ante las autoridades y, también, extraer las pruebas de las publicaciones del mismo dispositivo electrónico, y no así demostrar con impresiones en papel.

Revollo aclaró que el correcto procedimiento es que las autoridades realicen un peritaje, a través de un análisis forense digital, que reuna elementos suficientes para arrancar con un proceso.

RELEVANCIA

Se registraro ciertos hechos relevantes que movilizaron casi de inmediato a las autoridades nacionales para investigarlos y buscar responsables. Un ejemplo de ello fue la quema de un tsimané en el Beni, cuyas pruebas se viralizaron en Facebook a través de un video que causó indignación al viralizarse.