La investigación interna en la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) evidenció la clonación de matrículas de un total de 17 avionetas, reveló ayer el titular de esa entidad, Boris Terán. El reporte inicial señalaba que eran ocho.

Señaló que la investigación surgió luego de las denuncias recibidas acerca de una red de corrupción en la emisión de matrículas en Beni, específicamente en Trinidad y Santa Ana.

Para explicar el ilícito, dijo que si una aeronave es siniestrada, usualmente, es llevando o trayendo droga de Perú. Entonces, los falsificadores utilizan los datos (como número de serie y otros) y los ponen en otras aeronaves.

“Empezamos la investigación (...), nos dimos cuenta que el alcance iba a ser demasiado fuerte porque estábamos hablando de que iba a impactar especialmente en el narcotráfico”. Por esa razón y con autorización del Ministerio de Obras Públicas, se transfirió la información al Ministerio de Gobierno, a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) y al Ministerio Público.

 Dijo que esas instancias aún investigan y evitó dar más detalles para no entorpecer las pesquisas.

Lamentó que se hubiera filtrado el contenido de un informe “que ni siquiera tiene firma” porque, en vez de ayudar a identificar a los culpables, solamente se logró perjudicar a la investigación y alertar a los falsificadores.