Desde que comenzó la vacunación masiva para la población contra la COVID-19, el personal de salud encontró personas que acudían con certificados médicos falsos, indicó el responsable de Gestión Municipal y Redes del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Rolando Flores. Ayer detectaron dos casos en la Facultad de Medicina.

Para los que usaron certificados médicos falsos puede haber sanciones penales por el delito de falsificación material. Uno de los requisitos para las personas con enfermedades de base que acudieron a la vacunación era llevar y entregar el certificado original y eso ocasionó que el delito se cometa.

El personal se dio cuenta de estas falsificaciones cuando, por ejemplo, toda una familia se presentó con los certificados emitidos bajo el nombre de un médico. Otros casos fueron que cada vez iban personas más jóvenes y fuera de la edad en la que se tenían que vacunar, menores de 40 años e incluso algunos menores de edad. Otros que tenían, según el certificado, una enfermedad como asma no pudieron contestar qué medicamentos tomaban y en qué dosis. Otros casos fueron de diagnosticados con diabetes por médicos generales.

La población denunció que se ofrecen estos certificados en 500 bolivianos, cuando sacar el mismo es gratuito.

El Sedes investigará con la Unidad de Auditoría Médica si hay galenos que están otorgando estos certificados o son personas que no tienen la profesión y consiguieron la manera de falsificar los sellos y firmar médicas, manifestó Flores.

Los que adquirieron los certificados falsos tendrán problemas en conseguir las segundas dosis y tratarán de identificarlos en los puntos de vacunación, indicó.