Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 00:24

Saltan las alarmas por fiestas y SEDES prevé la cuarta ola a fines de este mes

El SEDES advierte que las fiestas y reuniones masivas podrían adelantar el rebrote. La falta de personal médico es otro de los problemas que enfrenta el departamento. 
Un grupo de personas en Bolivia. ARCHIVO
Un grupo de personas con y sin barbijo circula por una calle de Cochabamba. ARCHIVO
Saltan las alarmas por fiestas y SEDES prevé la cuarta ola a fines de este mes

El Servicio Departamental de Salud (SEDES) de Cochabamba prevé que la cuarta ola de coronavirus llegue a finales de agosto, aunque las fiestas que se realizan en diferentes puntos de la ciudad podrían adelantar el rebrote de casos. 

“Este fin de semana, hicimos un monitoreo en el área urbana y se ha visto muchas fiestas, muchas reuniones clandestinas, aglomeración y eso, lamentablemente,  incide de forma negativa al departamento, y podríamos comenzar la cuarta ola antes de lo proyectado”, aseguró el responsable de Vigilancia Epidemiológica del SEDES, Rubén Castillo.  

Por su parte, el presidente del Colegio Médico de Cochabamba, Alvin Siles, también señaló que las celebraciones masivas podrían traer serias consecuencias sanitarias al departamento. “Estamos preocupados porque se abrieron todas las actividades y eso conlleva que tengamos mayor contagio”, indicó.

Acotó que en dos semanas ya se podrían ver las consecuencias de la permisividad. “(…) entre el 21 y 22 de agosto es cuando todo empezará a ascender. Lastimosamente, se ha abierto todo y no hay un control. Eso será el detonante para el inicio de la cuarta ola”. 

Según el SEDES, el rebrote de casos estaba proyectado para septiembre u octubre, pero, debido a las malas conductas de la población y la llegada inminente de las nuevas cepas de COVID-19, podría adelantarse. 

“Todo depende del comportamiento de las personas, si no se cuidan y cuidan al resto, esto se va a desbordar. Hay que evitar eventos sociales, fiestas, cumpleaños, reuniones familiares con borrachera donde no se guarda ningún tipo de distanciamiento”, señaló Castillo.  

Asimismo, ante la inminente llegada de la cuarta ola al resto de país, el ministro de Salud, Jeyson Auza, anunció que el Gobierno está tomando medidas para atender el rebrote de casos. “Está en nuestra mente la posibilidad una cuarta ola, por eso es que estamos desplegando todos los esfuerzos”, sostuvo en entrevista con Cadena A. 

"Nuestro objetivo es que sigan disminuyendo los casos y esperemos que la cuarta ola no nos vaya a encontrar y vaya a iniciar el incremento de casos como empezó entre la segunda y tercera ola", agregó la autoridad. 

Por su parte, el Colegio Médico de Bolivia también coincidió en que el rebrote iniciará a finales de agosto y advirtió que la tendencia en estas nuevas olas es que sean de menor duración, pero con mayor número de contagios, según informó El País.

FALTA DE RECURSOS HUMANOS 

Durante la tercera ola de la COVID-19, la falta de oxígeno y espacio en terapia intensiva causaron desesperación. 

Ante esto, la Alcaldía inauguró una planta de oxígeno con capacidad de producir más de una tonelada diaria. Sin embargo, ahora el principal problema para enfrentar esta cuarto ola es la falta de personal humano, según indicó el presidente del Colegio Médico de Cochabamba. 

“Se tienen dos hospitales de segundo nivel, Hospital del Norte y Hospital del Sur, donde realmente no hay recursos humanos para hacerlos funcionar ni al 80% de su capacidad. Eso por un tema de falta de personal”, señaló Siles. 

“Es un problema que hasta ahora no se está subsanando. Si bien se avanzó bastante en el tema de equipamiento, sin el recurso humano es lo mismo que nada, no funciona”, añadió. 

VACUNACIÓN Y NUEVAS CEPAS

La vacunación es una de las medidas que más impulsa el SEDES para contrarrestar los efectos de la cuarta ola. Pero, hasta la fecha, la inmunización solo alcanza el 42% en Cochabamba, una cifra todavía “baja” .  

“Parece que tenemos que rogar para la gente se vacune. Los hospitales siguen saturados, no estamos libres, por más que se aumenten camas. Con la cuarta ola y las cepas que están circulando, lo que hagamos no va a paliar nada”, dijo el responsable de Vigilancia Epidemiológica del SEDES.

Sobre el tema, Siles aseguró que los puntos de vacunación este fin de semana estuvieron vacíos y que eso preocupa al personal médico. “La gente está escogiendo vacunas y esa misma gente es la que va a hacer sus actividades sociales. En Cochabamba, de 15 que están en terapia intensiva, 14 son personas sin vacuna”, aseveró. 

Sobre la incidencia de las nuevas cepas del coronavirus, Siles y Castillo coincidieron en que la variante Delta podría llegar en cualquier momento y “causar estragos” en la población si es que no toma las medidas de cuidado necesarias. 

Hasta la fecha, Cochabamba ya registró un caso de la cepa británica y cinco de la variante brasileña. Ninguno de los pacientes tuvo complicaciones y se recuperaron favorablemente. 

Sin embargo, eso no garantiza que la cepa india tenga los mismos efectos. “Pedirle a la población que acuda a vacunarse, no importa qué dosis, la que haya será la mejor. No esperen entrar a terapia intensiva”, solicitó Siles.

Por su parte, Castillo recomendó a la población que refuerce las medidas de bioseguridad básicas, como el lavado de manos, el uso correcto de barbijo y el distanciamiento social, para controlar la pandemia.