Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 11:57

Ruta de línea amarilla del tren sigue sin lograr consenso

Uno de los tramos de la línea amarilla del Tren Metropolitano. ARCHIVO DICO SOLÍS
Uno de los tramos de la línea amarilla del Tren Metropolitano. DICO SOLÍS
Ruta de línea amarilla del tren sigue sin lograr consenso


La inspección realizada por personal técnico del Tren Metropolitano, vecinos de la avenida costanera y sectores aledaños, arquitectos y ambientalistas terminó en discusiones, malos entendidos y sin consenso nuevamente.

El paseo para la revisión del tramo y las diversas afectaciones empezó alrededor de las 9:00 y finalizó a las 14:00.

En horas de la mañana, personal de la Unidad Técnica de Ferrocarriles (UTF), autoridades departamentales, municipales, vecinos y organizaciones involucradas en temas medioambientales inspeccionaron la ruta propuesta por la Asociación Accidental Tunari, decisión adoptada en el foro realizado hace tres semanas.

Se registraron discusiones, en las que los vecinos exigieron ver documentos en los cuales se refleje la ruta establecida para su revisión.

El representante de la Junta Vecinal Santa María, Pedro Canedo, pidió que se realice una auditoría integral a la línea amarilla del Tren Metropolitano. Advirtió que, caso contrario, procederán con una demanda penal a los responsables de este proyecto.
“Cochabamba en su plenitud, jamás ha exigido o pedido este Tren metropolitano”, señaló.

“Exigimos que se paralice esta obra y que esos dineros vayan a los sectores mas necesitados de la población. Queremos el progreso consentido de Cochabamba, no proyectos que enriquecen a unos cuantos y menos que dañen la ecología de la ciudad”, manifestaron los vecinos de la avenida Costanera.

Por su parte, el coordinador de la UTF, Limbert Illanes, subrayó que muchos vecinos que protestan “lo hacen sin presentar objeciones claras a la ruta”.

“Hemos recibido varias hojas de observaciones. Consideraremos las observaciones respecto a cada posible afectación que hacen los vecinos, el personal técnico, arquitectos y demás participantes de la inspección de hoy, ya que aún no se trata de una ruta plenamente aprobada, es solo una propuesta”, explicó.

Illanes indicó que muchas personas que se resisten a aceptar la propuesta de ruta cayeron en la desinformación.

“Por ejemplo, siempre va a haber cierto grado de afectación a las áreas verdes, pero se les ha indicado sobre los árboles que serán trasplantados y los cuidados, los métodos para reponer y todos los cuidados respecto a los servicios básicos y sus conexiones en el tramo”, añadió.

Explicó que la inspección realizada formaba parte de un compromiso entre autoridades nacionales, regionales, la empresa constructora y los vecinos, en el denominado Acuerdo de Responsabilidad Compartida (ARCO).
“Si hay 100 o 200 observaciones, anotaremos”, sostuvo.

Señaló que la línea amarilla bordearía la avenida Alfonso Arce, continuaría al río Rocha, ocupando parte de la calzada, pasaría por debajo, por desniveles hasta el puente Cala Cala. Luego pasaría por la avenida Ramón Rivero, Barrio Irlandés y seguiría por la avenida Chapare, hasta la zona de El Castillo, en Sacaba.

La línea amarilla recorre 10 kilómetros y tiene un 24% de avance físico.

Hasta ahora, se trata del tramo más problemático y con mayor atraso ante las observaciones y rechazos de los vecinos y ambientalistas por las afectaciones que ocasionaría al río Rocha.