Cinco de siete municipios del Eje Metropolitano respondieron a la Contraloría General del Estado (CGE) con compromisos en favor de la descontaminación del río Rocha. Sin embargo, Tiquipaya y Vinto todavía registran falencias.

El río Rocha, de unos 70 kilómetros de longitud, conduce aguas verdosas y malolientes, contaminadas, por los municipios de Sacaba, Cochabamba, Colcapirhua, Quillacollo, Vinto y Sipe Sipe.

En la Contraloría existen informes en torno al tema desde 2012, y se hizo el primer seguimiento en 2018, cuando se concluyó que “hubo un 40% de cumplimiento en las recomendaciones”, que comprendía el control y vigilancia de industrias a la mayor parte de los municipios del eje Metropolitano y la Gobernación; elaborar un plan de emergencia para el descontaminar el río Rocha; fortalecer las unidades ambientales y coordinar entre entidades a la mayor parte de los municipios del Eje Metropolitano y la Gobernación; además de construir plantas para para tratar aguas residuales.

Este año también se emitieron informes y se exhortó a las municipalidades a que respondan con cronogramas de trabajo de acuerdo con las recomendaciones; las instituciones pidieron ampliaciones de plazo y, en la actualidad, varias ya contestaron.

VINTO

En Vinto, el botadero de basura está a orillas del río Rocha.

La supervisora evaluadora ambiental de la CGE, Claudia Aillón, informó que Vinto envió su cronograma de trabajo, después de que se hicieron reclamos incluso ante el Concejo Municipal.

“El tema del botadero, de que no han logrado avanzar en la gestión de su planta de tratamiento de aguas residuales, les pone en conflictos”, dijo, y acotó que se les pidió no presentar cronogramas extensos.

Aillón describió que durante la anterior gestión municipal no se avanzó.

“La gestión municipal anterior ha sido deficiente en ese aspecto y, obviamente, a la nueva autoridad le toca empezar de cero (…). Vinto tiene mayores dificultades. Su cronograma ha llegado recién y está en proceso de revisión, todavía no está aceptado”.

Desde la Alcaldía vinteña informaron que están en los inicios del cierre técnico, clausura y saneamiento ambiental del botadero; la Alcaldía analiza el tema de presupuestos.

TIQUIPAYA

El río Rocha no pasa por Tiquipaya; sin embargo, las aguas no tratadas de este municipio llegan hasta el afluente y aumentan su contaminación.

El problema se registra debido a la oposición de los pobladores de la zona de Bruno Moq’o para construir ahí la planta de tratamiento. En semanas anteriores hubo conflictos en la zona.

“Les dificulta presentar un cronograma con plazos en los que vayan a poder terminar o asegurar por lo menos la construcción de la planta de tratamiento”.

Aillón recordó que este municipio tiene el predio para la construcción y que los recursos están garantizados por el Ministerio de Medio Ambiente y Agua. Queda en manos de la Municipalidad lograr que la gente acepte la instalación de la planta.

“La Contraloría hizo supervisión en la zona. Casi el 70% de las aguas del municipio llega al río Rocha a través del emisario que administra Semapa, incluso están usando un emisario que no pertenece a Tiquipaya. Semapa (Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado), indirectamente, administra sus aguas y las descarga a través de Valverde y, de ahí, va al río Rocha”.

De acuerdo con un informe de la CGE, las aguas residuales en Tiquipaya tienen apenas tratamiento básico o ninguno, y llegan a ríos como Ángela Mayu y el Rocha.

OTROS MUNICIPIOS

En el caso de los otros municipios de la región Metropolitana, sí presentaron cronogramas, que tienen tareas referidas a las recomendaciones de la Contraloría. Los plazos son hasta 2022 y 2023, sobre todo para las plantas de tratamiento.

En el caso de Sacaba, que tiene en construcción la segunda planta, la misma debe concluirse hasta finales de este año o probablemente hasta principios de 2022.

En el municipio de Cochabamba, se considera la ampliación de la planta de tratamiento de aguas residuales de Albarrancho. El cronograma expone plazos hasta fines de 2022 o principios de 2023, dependiendo de las modificaciones que puedan tener en el avance de la obra.

“Eso ya no es competencia exclusiva de Semapa, sino de Emagua (Entidad Ejecutora de Medio Ambiente y Agua), que está a cargo de la administración de la construcción de la planta”.

Por su lado, Colcapirhua, manifestó la supervisora evaluadora ambiental de la CGE, se comprometió a trabajar en la construcción de la planta de tratamiento para ese municipio entre la gestión que viene y la subsiguiente, “porque construir una planta no es fácil” y es necesario conseguir el terreno, considerar el diseño y la implementación, lo que requiere entre uno y dos años.

Mientras, en Sipe Sipe ya cuentan con el financiamiento por parte del Ministerio; además, este municipio no tiene conflictos con el terreno; por lo que se desarrollará el proceso de contratación y posterior inicio de obras.

“Ellos han reportado avances, no hemos tenido observaciones. Estamos a la espera de que eso avance. Vamos a pedir reportes en enero, para ver todo lo que se ha hecho en esta gestión, por lo menos para estas recomendaciones que son de plazos un poco más extensos”, expresó Aillón.