Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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Productores ecológicos, el último reducto de la alimentación saludable

Familias de emprendedores del Valle Bajo cultivan alimentos sin el uso de agroquímicos. Reciben en sus parcelas a sus clientes, en visitas programadas.

Mery Abasto explica las bondades del vinagre que producen en Organic Victoria. JORGE FERNÁNDEZ
Mery Abasto explica las bondades del vinagre que producen en Organic Victoria. JORGE FERNÁNDEZ
Productores ecológicos, el último reducto de la alimentación saludable

El terreno de doña Mery Abasto, en la zona de Tacata Purgatorio, municipio de Quillacollo, es uno de los últimos reductos donde se cultiva la manzana camuesa, cuya fruta se consume directamente o mediante sus derivados.

En este predio de 8.000 metros cuadrados hay plantas de manzana camuesa, choclo y panales de abeja para la elaboración de miel.

Hasta este sector llegaron unas 30 personas en una visita impulsada por la Fundación Agrecol, organización que promueve el cultivo de alimentos ecológicos y el consumo de los mismos por parte de familias que se encuentran aglutinadas en un grupo de WhatsApp.

Agrecol impulsa, además, ferias en las que se promueve la venta de productos ecológicos por parte de agricultores urbanos que cumplen una serie de requisitos en el cultivo de alimentos ecológicos certificados.

Esta Fundación trabaja desde hace 21 años en Bolivia con el desarrollo agropecuario sostenible, apoyando a familias urbanas, periurbanas y rurales en lo que se refiere a la agricultura ecológica.

Esta agricultura no tiene dependencia de insumos externos, es decir, no utiliza agroquímicos, además de que toda la familia se involucra en el proceso de cultivo y se respeta el medioambiente y a los seres vivos.

PERSISTENCIA

Mery Abasto asegura que la parcela en la que mantienen plantas de manzana camuesa pertenece a sus abuelos y ella, junto con su familia, apostó por mantenerla productiva y no ceder terreno a la inexorable ampliación de la mancha urbana que deja cada día menos tierras cultivables en el Valle Bajo.

La emprendedora señala que con la manzana camuesa elaboran una variedad de alimentos sin conservantes, en forma artesanal, con Organic Victoria, y destaca las bondades de esta fruta que es mucha más rica en nutrientes y en pectina que las que se importan.

La manzana camuesa es, a decir de Abasto, una variedad que solo se produce, al menos con esas características, en esta región del Valle Bajo.

Una muestra de productos elaborados por Organic Victoria.
Una muestra de productos elaborados por Organic Victoria.

Cada año, los productores que aún quedan en esta región del Valle Bajo, que no son más de una decena, realizan la tercera semana del mes de marzo una feria en la que exponen y venden manzana y productos elaborados a base de esta fruta, en el sector denominado Tacata Purgatorio.

“Nuestro producto estrella es el vinagre (de manzana), pero después de capacitaciones y talleres fuimos implementando licores, néctar, deshidratamos la fruta y rescatamos la materia madre del vinagre”, señala Abasto en su huerta.

En este emprendimiento también se elabora repostería, con la materia prima que es la manzana.

En cuanto a los alimentos elaborados a base de manzana, Abasto señala que no utilizan conservantes.

Venden su producción los miércoles en la feria del Parque La Torre, frente al colegio Loyola, desde hace 15 años.

Igualmente participan en las ferias que organiza la Fundación Agrecol, donde, según la emprendedora, obtienen experiencias enriquecedoras.

Uno de los objetivos que impulsa a la familia de Mery Abasto para mantener este emprendimiento es que la gente aprenda a comer sano y que confíe en lo que se produce localmente, con el fin de requerir menos medicina.

Lo que sí lamenta es que el número de parcelas se ha reducido considerablemente en esta zona del Valle Bajo, primero porque el mercado para esta fruta se ha restringido. Recuerda que antes se llevaban cargas de manzana camuesa a las minas, algo que se ha cortado.

Otro aspecto que ha hecho que haya menos parcelas de manzana camuesa es la ampliación de la mancha urbana y el mayor número de construcciones que le quitan terreno a esta fruta.

“Este es uno de los pocos huertos que quedan”, señala Abasto, y agrega que junto a su predio hay un terreno en el que se cultivaba manzana camuesa, pero que lo más probable es que pronto se convierta en un edificio con departamentos.

NÉCTAR Ronald García Coronel es otro visionario que decidió iniciar un emprendimiento para procesar alimentos, pero, a diferencia de los convencionales que se encuentran en el mercado, en su caso los elabora sin casi nada de conservantes ni preservantes.

Productos alimenticios Vero es el emprendimiento que este ingeniero de alimentos, junto con su esposa, llevan adelante como un desafío para ofrecer productos que no dañen la salud de los consumidores.

El 5 de abril de 2011 dio sus primeros pasos en este rubro, pero la idea nació en él incluso cuando estudiaba en el colegio y se afianzó mientras cursaba la carrera de Ingeniería de Alimentos.

La empresa que él dirige se encarga de procesar, transformar y comercializar alimentos, para lo cual elige meticulosamente fruta ecológica y de buena calidad.

Productos Vero ofrece mermeladas con azúcar y estevia, de diferentes sabores; manjar de leche con azúcar y estevia; jugos; néctar; galletas; granolas, quesos y repostería.

Destaca que varios de sus productos llevan la certificación ecológica a nivel nacional, desde la materia prima que es la fruta, que se cultiva sin agroquímicos.

Para que el producto final tenga un buen sabor y no sea dañino para la salud, en el procesamiento no se utilizan preservantes, estabilizantes ni la infinidad de aditivos de otros productos.

“Solo se utiliza en algunos productos una porción mínima de conservantes en los que se elaboran con estevia”, precisa.

En cuanto al precio, afirma que son competitivos con relación a los alimentos que se producen en grandes cantidades.

Y como Productos Vero tiene registro sanitario y cumple con los diferentes requisitos establecidos por las normas bolivianas, está en la capacidad para proveer, por ejemplo, al desayuno escolar, tan solo necesita una oportunidad.