El mosquito Aedes aegypti es el principal vector de los virus que causan el dengue. Antes, su hábitat era a 500 metros metros sobre el nivel del mar, es decir vivía en el Trópico de Cochabamba, pero ahora está en la ciudad de Cochabamba, es decir a 2.550, se ha adaptado a un nuevo clima.

El responsable de Vigilancia Epidemiológica del Servicio Departamental de Salud, SEDES, Rubén Castillo, dijo que analizaron muestras que le llegó de varias regiones y confirmó que es vector tiene un nuevo hábitat. 

“El mosquito ya se ha adaptado a la ciudad, a 2.550 metros sobre el nivel del mar, es decir el municipio de Cochabamba. En Capinota está a 2.600; En Punata, a 2.400, Tiquipaya a 2.560 y en todas las regiones”.

Agregó que tienen  muchas muestras que llegan al SEDES desde de diferentes puntos. “Nuestros técnicos de vectores realizan encuestas entomológicas e investigan. Se han identificado larvas viables durante todo el año 2019”. 

Aclaró que hasta el momento no encontraron que el mosquiito haya transmitido la enfermedad, por tanto no hubo ningún caso autóctono. 

“Lamentablemente esta epidemia del Trópico podría representar un problema de salud pública en este periodo epidemiológico. Gente del Trópico está saliendo enferma. Si ya lo tenemos en Cercado, bastaría que un mosquito pique a un enferma y esta transmita a una sana. Ahí estaríamos registrando un caso autóctono”.

De ocurrir aquello, se convertirá en un problema de salud pública muy grande. “Controlar la circulación de este virus en la magnitud de población del área metropolitana sería un trabajo muy grande”.

Señaló que la alerta de la adaptación ya fue lanzada en 2016 y se hizo conocer incluso a la Organización Mundial para la Salud. Está sucediendo en las áreas desérticas de Chile y también en Colombia.    Dijo que se proyecta que los siguientes  10 años serán catastróficos, según la proyección de la misma OMS. 

MEDIDAS Castillo recomendó que el aseo de la casa es la única forma de combatir el mal. “Hay que revisar canaletas, sumideros, turriles, cubrirlos para evitar que la hembra se pose y ponga huevos. Lavar el borde de los turriles con lavandina y un cepillo porque el mosquito tiene resistencia a la sequedad. El huevo puede estar un año apegado en la pared y con el agua cobra  vida.

Por eso se recomienda lavar bruscamente la parte interna y el borde del turril que se tenga el casa. También cortar el césped por lo menos una vez a la semana para evitar proliferar del vector. Revisar los floreros y evitar los charcos.