Un octubre trágico para el medio ambiente en el departamento. Después de presentarse varios focos de calor, la Secretaría de la Madre Tierra de la Gobernación de Cochabamba informó que el fuego consumió al menos 800 hectáreas, solo este mes, entre pajonales y especies forestales en el departamento. Los principales focos de calor se presentaron en el Parque Nacional Tunari (PNT), la laguna Alalay y, el último, en el municipio de Mizque.

El fin de semana pasado, ardieron al menos 650 hectáreas del área protegida. Un 20 % de ellas fueron especies forestales y lo demás pajonal, de acuerdo al informe que brindó el gobernador de Cochabamba, Humberto Sánchez. 

“Estas 800 hectáreas son sin contar con el incendio de Mizque y este número va a subir, pero primero debemos hacer las actividades de enfriamiento para cuantificar la afectación”, aseveró la secretaria de la Madre Tierra de la Gobernación de Cochabamba, Maricela Rodríguez.

Hace tres días un incendio en el municipio de Mizque no daba tregua debido a que la acción de los vientos ocasionaron que las llamas se propaguen de manera inmediata, incluso hasta el municipio de Totora. Sin embargo, tras un trabajo arduo de diferentes equipos que sumaron las 120 personas desplazadas, se logró trabajar en apagar las llamas y enfriar el lugar. 

En este incendio se quemaron principalmente pajonales y se desconocen las causas que ocasionaron el fuego.

Entre tanto, otro espacio de biodiversidad que sufrió un incendio esta última semana fue la laguna Alalay donde ardieron al menos 40 hectáreas de totorales, pero la gran pérdida se vio en las especies de aves que tenían sus nidos en estos espacios que quedaron carbonizados.

Desde la Madre Tierra de la Gobernación ya hicieron la denuncia para poder dar con los responsables de cada uno de estos incendios que se presume fueron provocados.