Solo el 0.70% de la población cochabambina desarrolló anticuerpos contra el coronavirus, según las cifras oficiales. Lo que significa que el departamento está lejos de alcanzar la inmunidad colectiva.

La inmunidad grupal o rebaño se da cuando la mayoría de la población, entre el 50 a 60%, es inmune a una enfermedad, y bloquea su propagación, de acuerdo con información publicada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

De los más de 1.9 millones de habitantes del departamento, solo 13.987 enfermaron desde el brote del virus, en marzo de 2020. El resto, 99.3% (equivalente a 1.958.013 personas), aún es vulnerable al COVID-19.

Para lograr inmunidad grupal, 972 mil personas más tendrían que contraer coronavirus en Cochabamba.

CIFRAS

Si bien los reportes oficiales contabilizan 13.987 enfermos con COVID-19 en Cochabamba, el jefe de la unidad de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (SEDES), Rubén Castillo, dijo que, últimamente, hay una suerte de “subnotificación”.

Por lo que, en su criterio, “un caso (de COVID-19) representa cuatro casos”. Haciendo cálculos, eso significaría que en el departamento más de 55 mil personas habrían contraído este mal.

Suponiendo que Cochabamba tendría ese número de enfermos, tampoco estaría cerca de alcanzar la inmunidad, porque solo equivale al 2.8% de la población total.

Respecto a otros departamentos del eje troncal del país (La Paz y Santa Cruz), en la Llajta la prevalencia de virus es menor.

Los servicios departamentales de salud cruceño y paceño estimaron que, a estas alturas de la pandemia, cerca del 15% de sus habitantes se contagiaron con coronavirus. Si bien el porcentaje es elevado, también están lejos de la inmunidad colectiva.

EN EL MUNDO

La jefa científica de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Soumya Swaminathan, explicó que en los países más afectados por la pandemia solo entre el 5 y el 10% de la población tiene anticuerpos, aunque en algunos casos se alcanzó hasta el 20%.

En las primeras etapas de la pandemia, países como Gran Bretaña propusieron lograr la inmunidad de grupo como estrategia de respuesta al COVID-19, pero Swaminathan destacó que alcanzar este efecto con una vacuna es mucho más seguro que dejar que el virus se extienda entre la población.

Para obtener la inmunidad de grupo, a través de una infección natural, se necesitan varias oleadas de contagios con una morbilidad y mortalidad como las actuales, agregó.

SITUACIÓN

Para tener una contabilización real de los casos de COVID-19 en Cochabamba, es necesario que la población acuda a los establecimientos de salud, sin importar el nivel de gravedad de la enfermedad.

“Ante síntomas leves, la gente ya no está yendo a ser captada por el sistema de salud”, dijo ayer Castillo. Añadió que muchos esperan llegar a la fase crítica del virus y recién acuden de emergencia a los centros de salud. Ven esos casos, especialmente, en el Hospital Clínico Viedma.

El especialista dijo que, si bien el 85% de las personas pasa esta enfermedad de manera asintomática, puede haber repercusiones o, incluso, muerte, si en el entorno familiar hay adultos mayores o personas con males de base.

Instó a la población que está acudiendo a las pruebas rápidas y está dando positivos al coronavirus, que se hagan la PCR para confirmar la enfermedad.

“Estamos en una desescalada, pero está presente el virus“.

Quillacollo deja de ser un municipio con “riesgo alto”

En Quillacollo se ralentizó la propagación del coronavirus. Este municipio ya no está dentro de la categoría “riesgo alto”, de acuerdo con un informe del Ministerio de Salud.

El Índice de Riesgo Municipal COVID-19, publicado recientemente por la instancia gubernamental competente, estableció que de 339 municipios de Bolivia, solo 13 cambiaron de categoría: pasaron de estar en “riesgo alto” a “riesgo medio”. Entre ellos, uno es de Cochabamba, se trata de Quillacollo.

A ese municipio se lo puso en esa clase, debido a que bajó la tasa de incidencia de casos activos COVID-19.

Ahora, en Cochabamba hay solo ocho municipios con “riesgo alto”. Tacahi, Morochata, Colcapirhua, Sipe Sipe, Cercado, Tiquipaya, Tolata y Sacaba. Antes, con Quillacollo, eran nueve.

Este informe positivo para este municipio se refleja en el último reporte del Servicio Departamental de Salud (SEDES), del 2 de noviembre, que da cuenta de que en Quillacollo no hay ningún contagiado ni fallecido.