Fernando Vargas, el nuevo intendente municipal de Cochabamba, indicó que la alta cifra de casos que registran la ciudad "ni siquiera conmueve a algunos dueños de boliche" que funcionan fuera de los horarios de restricción y sin medidas de bioseguridad contra la COVID.

"Tenemos más de 500 casos diarios. Cuando era la primera ola, había 200 y Cochabamba estaba parada, nadie salía; hoy estamos con 500 y parece que ni siquiera eso conmueve a algunos dueños de estos boliches que solo tienen la visión de seguir lucrando sin importar que se enfermen lo importante es lucrar", refirió la autoridad en una entrevista con el programa Buena Noche de OPINIÓN.

Después de realizar inspecciones y batidas a diferentes pubs, locales y cafés, en un fin de semana que calificó de "terror", Vargas indicó que "no seguirá permitiendo" que boliches sigan funcionando "acostumbrados a pagar o por influencias económicas", aseveró al mismo tiempo de indicar que ya ha recibido amenazas en los tres días que lleva de trabajo. 

"Cuando hicimos el operativo el viernes, 7 de mayo, nos encontramos locales hacinados de gente, sin barbijo, fuera del horario de funcionamiento. Son difíciles de hacer (los operativos) porque algunos dueños se resistían a que entremos a desalojar. Hemos tomado la decisión de clausurar estos locales en la Melchor Urquidi. Al día siguiente fuimos a la zona sur y la situación era igual o peor que en la zona norte, jóvenes sin carnet de identidad que fueron retenidos en la EPI", contó Vargas, informando que cambiaría la hermenéutica de las inspecciones después de enterarse que se filtran los recorridos de la Intendencia. 

Para denuncias directas, Vargas indicó que se lo puede contactar en su número: 70373088.